El calzado del bebé por etapas

Desde que nuestros bebés nacen debemos aprender a proteger apropiadamente su piel y su cuerpo. Por múltiples razones, el calzado del bebé es un tema en el que cometemos muchos errores, principalmente al no elegir el adecuado en la etapa y necesidades del bebé, por ello a continuación citaremos algunos puntos a considerar a la hora de vestir los piecitos de nuestros pequeños.

Calzado de bebé para antes de caminar

Como madre, conozco esa sensación de ternura desbordada que experimentamos al vestir a nuestros pequeños bebés con atuendos curiosos o que se asemejan a prendas de adulto en miniatura, pues bien pareciera que los zapatos entre más pequeños llaman más nuestra atención.

Pero también sé que debemos calmar nuestro impulso de vestirles con cosas que, por más abrazables que los hagan lucir, puedan lastimarles.

Los piecitos de un bebé recién nacido son muy frágiles; es más, ni siquiera soportar su propio peso pueden. Para ello es necesario calzarlos con prendas ligeras que únicamente les cubran del frío sin ninguna otra función: las calcetas son ideales. Ahora, si lo que quieres es conseguir prendas fuera de lo común, también hay diseños que se asemejan a zapatos deportivos, caritas de animales y otras figuras con nada más que tela.

Siguiendo en la etapa de los primeros pasos, o bien cuando el bebé ya comienza a pararse o andar en la andadera, lo recomendable es mantenerlos descalzos, siempre que el clima lo permita. Con esto tu bebé experimentará nuevas sensaciones y texturas que le ayudarán a dicha etapa. No bloquees sus sentidos con suelas gruesas si, por ejemplo, el suelo está muy frío, entonces puedes optar por zapatos suaves y flexibles.

Calzado de bebé al caminar

Una vez que el pequeño o pequeña dominan el arte de caminar es tiempo de pensar en zapatos que protejan no sólo la planta de su pie sino además que soporten la estructura entera. Para ello lo más recomendable son los zapatos de bota ya sean tenis o casuales.

Siguiendo en el tema de lo llamativo, evita adquirir aquel calzado comercial pero poco funcional, los zapatos muy bajos o tacones en niños y niñas muy pequeños pueden alterar y malformar el andar así como la misma anatomía del pie.

Recuerda que ya habrá tiempo para lucir tanta coquetería, por el momento deberemos concentrarnos en la funcionalidad y calidad del calzado en una etapa tan significativa en nuestros hijos. Observa muy bien el andar de tu bebé, la formación de su arco y la forma en que se mantiene de pie.

Ante cualquier duda consulta a tu pediatra u ortopediatra (ortopedista pediátrico), ya que en muchos de los casos nuestros bebés podrían requerir de calzado especial.