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Durante el parto el suelo pélvico podría dañarse: cómo evitar que te suceda

Después del parto hay grandes cambios físicos, pero hay otros que no son tan visibles. El cuidado posparto es muy importante para lograr recuperarse completamente, en ese periodo es fundamental el control médico para evitar posteriores problemas.

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Durante el parto, por la gran presión, el suelo pélvico puede dañarse. Los músculos que se encuentran en la parte superior de la pelvis se distienden y muchas veces se dañan, por eso es importante ayudar a que esa musculatura pueda recuperar su función: sostener adecuadamente a la vejiga, el útero, la vagina y el recto.

Las consecuencias del daño del suelo pélvico

Imagen Shutterstock

Tanto el embarazo como el parto pueden afectar al suelo pélvico. Durante el embarazo esos músculos se estiran, y en el momento del trabajo de parto pueden dañarse. La doctora Lauren Streicher dijo a Reader's Digest que la debilidad del suelo pélvico puede causar prolapso rectal o uterino, y también incontinencia de orina y heces.

Según la especialista, también puede disminuir la respuesta orgásmica, —que depende de las contracciones del suelo pélvico— y, en casos extremos, puede hacer que las relaciones sexuales sean dolorosas.

Cómo cuidarlo antes, durante y después del embarazo

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Antes del embarazo

  • Según The Simon Foundation for Continence, fumar cigarrillos aumenta el riesgo de incontinencia urinaria si hay un daño en el suelo pélvico, incluso para quienes fueron fumadores. Cuanto antes dejes de fumar, tendrás menos riesgos de daño en el suelo pélvico, como también será más beneficioso para la salud del bebé.
  • Si tienes sobrepeso, intenta volver a tu peso. «Las mujeres que tienen sobrepeso, o aumentan mucho de peso durante el embarazo, tienen más probabilidades de tener problemas con el suelo pélvico por al aumento de la presión», explica la doctora Streicher.
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Durante el embarazo

  • Nunca es demasiado tarde para comenzar a fortalecer el suelo pélvico. La doctora Streicher recomienda hacer ejercicios que fortalezcan esa musculatura. Hacer los ejercicios de Kegel durante el embarazo puede ayudar mucho, pero tienes que asegurarte de hacerlos bien.

Después del embarazo

  • Puedes seguir haciendo los ejercicios de Kegel después del parto. La incontinencia urinaria posparto es más común de lo que crees, pero luego desaparece. Es importante que prestes atención si continuas con incontinencia por mucho tiempo o si sientes dolor al tener relaciones sexuales, eso podría significar que hay un daño en esos músculos.

Cualquier ejercicio que fortalezca los abdominales también son beneficiosos para el suelo pélvico. Es importante que siempre consultes con un profesional si tienes dudas sobre los ejercicios adecuados o los que mejor se adapten a ti.

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