Consejos para madres sobreprotectoras

La maternidad en la actualidad es vista como una elección de la mujer que desea tener un hijo. Sin embargo, muchas veces este rol tan importante con nuestro bebé, sobretodo los primeros meses, puede volvernos inseguras y convertirnos, en consecuencia, en madres sobreprotectoras con nuestros hijos.

Frente a la inseguridad y los peligros de la calle, solemos mantener a nuestros hijos alejados de lugares que podrían resultar amenazantes. A la noche o cuando oscurece, por lo general los mantenemos en casa. Pero esta conducta puede volverse una obsesión en la que restringimos el contacto de nuestros hijos con el mundo exterior, de tal forma que el niño se cria en una cajita de cristal en la que no conoce la realidad que lo rodea.

Está bien cuidar a nuestros hijos, pero el exceso nunca es bueno. Un niño que es sobreprotegido se cría con temor e inseguridad y esto lo afectará el resto de su vida en todos los ámbitos donde quiera desarrollarse como individuo.

Cuidado maternal

Muchas veces como mamás sentimos que nuestros pequeños deben estar a nuestro lado siempre y no queremos separarnos de ellos. Aquí es cuando debemos entender que en determinado momento ellos deben experimentar y socializar con el mundo de afuera.

Cuando tomamos la decisión de llevar a nuestro hijo al jardín o la escuela, el niño aprende a estar con otras personas que no son sus padres. Está rodeado de otros nenes y maestras. Si nosotros criamos con inseguridad a nuestro pequeño no podrá adaptarse bien a la escuela.

Es importante saber distinguir el límite de cuidar a nuestro hijo y sobreprotegerlo. El niño va a estar expuesto a personas y lugares extraños que lo van a ayudar a crecer y aprender como el colegio. Por eso hay que tener en cuenta que debemos explicarle a nuestros nenes los peligros y estar atentos ante conductas extrañas.

Crianza en casa

En algunos casos, los padres prefieren que sus hijos sean criados bajo el sostén familiar con algún tutor o maestro que vaya a enseñarles en su hogar, sin salir al exterior. Esta muchas veces es una costumbre tal vez impuesta por nuestros progenitores, pero no por eso debemos transmitirla a nuestros hijos.

Es inevitable que el niño salga afuera, ya que ahí es donde aprende los verdaderos valores y los peligros que debe enfrentar. Como padres debemos brindarle afecto y atención en todas las etapas de su vida. Ante todo es importante acompañarlo en sus salidas hasta que tenga suficiente edad como para manejarse solo.

Como mamá yo acompaño a mi nene a los cumpleaños y lo llevo conmigo a todos lados. Pero sé que en determinado momento voy a tener que enseñarle a ir por sus propios medios. Esto será cuando considere que tiene los conocimientos y edad suficiente para entender el mundo que lo rodea.

¿Te consideras una madre sobreprotectora?