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Cómo hablar con tus hijos sobre la muerte

La muerte es un tema que produce temor y confusión en los niños. Si tienes que explicarles qué es la muerte tras la pérdida de algún familiar o ser querido, ten en cuenta estos consejos. 

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El inevitable ciclo de la vida

La muerte forma parte del ciclo de la vida y nadie la puede evitar. Nacemos, trascurrimos y morimos. Hay personas adultas a las que todavía el tema les produce escalofríos, así es que ¿cómo no entender que a los niños les suceda lo mismo?

Es necesario que los niños sepan de qué se trata la muerte. Lo ideal es no esperar hasta que algo suceda en nuestro entorno cercano para que los hijos entiendan por sí mismos en qué consiste a muerte.

Hay que tomarlo como lo que es; un proceso natural por el que pasaremos todos y de igual forma hay que transmitírselo a los niños. En ocasiones subestimamos a los pequeños con respecto a cuánto saben acerca de cierto temas y luego nos damos cuenta de que tenían mucha más información de la que creíamos.

No es el tema más alegre para hablar con nuestros hijos, pero no por ello tenemos que poner caras y hacer gestos tenebrosos o que de alguna forma puedan inquietarlos y ocasionarles más temor.

La muerte es un tema envuelto por enigmas misterios que nadie puede resolver, por lo que ante posibles preguntas de tus hijos no tengas reparo en decirle que no sabes o desconoces la respuesta.

Pregúntales a tus hijos qué piensan que es la muerte; puede que te sorprendas con su relato y hasta que su forma de pensar conocida con la tuya o por el contrario difiera totalmente. como sea, no te burles ni hagas bromas al respecto. Ten en cuenta el punto de vista de ellos.

Háblales y pon en práctica si tienes la oportunidad de hacerlo delante de ellos, el hecho de brindar condolencias a una persona que perdió a un familiar o amigo recientemente. Explícales de qué se trata y por qué se hace.

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Imagen Thinkstock

La muerte según la edad de los niños

Antes de comenzar la primaria, los niños asocian la muerte con un echo de destrucción que puede se re-construido, así suelen ver sobre todo en la televisión como sus personajes favoritos cobran vida luego de haber saltado desde un tejado. Cuando pasan por algunos momentos importantes como puede ser la muerte de una mascota, el proceso de comprensión puede verse acelerado.

Es importante que al hablar con niños pequeños utilices palabras cortas y simples, y que además hagas mención a los sentidos vitales para explicar cuándo una persona se muere. Por ejemplo, puede decirle: Alguien se muere cuando ya no respira, no puede comer, no le late el corazón, no siente, no habla.

Puede que te pregunte varias veces lo mismo; debes tener paciencia, es algo nuevo para ellos pero además intangible, por esto es que muchas veces asocian la muerte con la pérdida o la separación.

Ya una vez en la etapa primaria es muy normal que relacionen a la muerte con imágenes; una típica es la de los esqueletos, de algún modo se van familiarizando con la muerte y comprendiendo que cuando algo o alguien se mueren ya no vuelve, aunque creen que eso a ellos no les pasará.

Al comenzar la adolescencia, entienden qué es la muerte y saben que también les sucederá

Algunas frases como “descansa en paz” o “El tío se ha ido”, pueden ser muy confusas para los niños y provocarles grandes miedos al pensar que si su tío se ha ido (porque así se lo dijeron) y no ha vuelto. Quizá a mamá le ocurra lo mismo cuando dice que se va. O pueden creer que si dicen que determinada persona descansa en paz y asocia al hecho con no haberla visto nunca más, puede creer que cuando alguien duerme descansa y por ello se muere.

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Es importante que los niños sepan qué es la muerte para que no tengan conceptos equivocados. No esperes a que ocurra una muerte cercana para hablar con ellos sobre el tema.