Vivimos en un mundo lleno de ruido: la contaminación acústica reina y encontrar un momento de silencio puede ser tan difícil como vivir sin estrés.
¿Sabes que tan importante es el silencio para tu cerebro? La ciencia te responde

Pero, vas a tener que hacer un esfuerzo para disfrutar más del silencio. ¿Sabías que este es sumamente importante para tu cerebro? Mira cómo puede beneficiarte...
#1 Ayuda a regenerar las células

En 2013 la revista Brain, Structure and Function publicó un estudio sobre cómo el silencio y los diferentes tipos de ruidos afectaban a un grupo de ratones, y lo que hallaron fue sorprendente.
Los científicos descubrieron que cuando los ratones eran expuestos a dos horas de silencio por día desarrollabon células nuevas en el hipocampo, una región asociada con la memoria, el aprendizaje y las emociones.
#2 El cerebro puede evaluar mejor la información

Un estudio realizado en 2001 sugiere que aunque parezca que el cerebro está inactivo en un momento dado de silencio, en realidad se encuentra activo, evaluando las mejores maneras de procesar la información.
Joseph Moran de Frontiers in Human Neuroscience aclara que cuando el cerebro descansa es capaz de incorporar información, en una especie de trabajo inconsciente.
Cuando no nos distraemos por el ruido u otras actividades, el silencio nos ofrece condiciones óptimas para procesar mejor la información. ¡Tenlo en cuenta la próxima vez que te sientes a estudiar!
#3 Alivia el estrés y la tensión

Se ha evaluado y llegado a la conclusión de que el ruido puede tener un impacto negativo en el cerebro. Y es que se ha demostrado que cuando las ondas sonoras llegan al cerebro como señales eléctricas a través del oído, las hormonas del estrés se disparan.
Por otro lado, la revista Psychological Science publicó en 2002 un estudio en el que se investigaron los efectos del ruido en un grupo de niños. El profesor de la Universidad de Cornell Gary Evans halló que los chicos expuestos al ruido desarrollan una respuesta que les hace ignorar estos sonidos molestos. Ahora bien, lo que preocupa no es que ignoren los ruidos molestos, sino que además desatienden estímulos a los que sí deberían prestar atención, como el habla.
#4 Potencia nuestra cognición

Hay varios estudios realizados en niños que están expuestos a una fuerte contaminación acústica y que concluyeron que ellos son más propensos a tener problemas de puntuación y son más lentos en el desarrollo de sus habilidades cognitivas y del lenguaje.
¿Qué hacer entonces para encontrarlo?

Deberías optar por un paseo por el parque o un lugar donde reine el silencio. Así es: realizar actividades al aire libre, donde puedas apreciar el silencio pero además los pequeños sonidos de la naturaleza será una idea excelente.
El zumbido de la brisa primaveral, el ruido de las olas cuando rompen en la orilla del mar o simplemente el sonido de las hojas al moverse en los árboles te llenarán de energía, amor y mucha paz. Y además le estarás brindando grandes beneficios a tu cerebro.









