Cuando emprendemos el duro camino para bajar de peso, probablemente nos aferramos a cualquier opción que nos prometa quemar grasas de forma fácil y segura. Aun así, debemos estar atentos a que estos métodos sean realmente seguros y de comprender a fondo su modo de actuar, ya que muchas veces supravaloramos el efecto de algo sólo porque queremos eliminar nuestros kilos de más sin ningún esfuerzo.
¿Qué son las cremas para quemar grasa?

Y aunque esto pocas veces es posible, existen las cremas para quemar grasas que en muchas ocasiones son consideradas como un remedio mágico para el sobrepeso. Veamos cuánto de verdad hay en ello.
La verdad sobre las cremas para quemar grasas

Como bien sabes, la industria de la cosmetología ha avanzando a pasos agigantados en cuanto a la colocación de productos en el mercado destinados para los más diversos problemas y situaciones. En el caso de las cremas para quemar grasas se tratan justamente de esto: un producto cosmético con propiedades para reducir la grasa corporal.
Hasta aquí la percepción que puedes tener sobre estas cremas es correcta, pero el error que muchas personas cometen es considerar a estos productos como un método con el cual van a poder adelgazar con el simple hecho de untarse un poco de crema todos los días.
Si bien las cremas para quemar grasa poseen facultades para localizar y reducir determinadas cantidades de grasas subcutáneas, así como la de tonificar y moldear la piel, su efecto ha de notarse únicamente si se las utiliza para acompañar programas alimenticios y de ejercicios dirigidos específicamente a bajar de peso. De otra forma, sería como querer vaciar un lago utilizando únicamente el cuenco de tus manos.
¿Cómo funcionan las cremas adelgazantes?

Efectivamente, las cremas para quemar grasa podrían reducir la grasa corporal si se los aplica de forma adecuada y se los acompaña con un régimen habitual para bajar de peso, pudiéndose eliminar alrededor de 2 milímetros de grasa tras un promedio de 8 semanas de aplicación.
Este efecto es posible gracias al contenido de aminofilina y/o ácido glicirretínico, también conocido como enoxolona, los cuales estimulan la actividad de las enzimas lipolíticas, responsables de quemar las grasas, y aumentan el flujo sanguíneo, lo cual permite una mejor eliminación de las grasas previamente desglosadas por las enzimas lipolíticas.
De todas formas, aunque estos componentes han sido identificados como los verdaderos causantes de la reducción de grasa corporal, no todos los productos destinados con este fin los contienen, por lo que tendrás que analizar muy bien la composición de cada producto antes de adquirirlo.
Luego sólo tienes que untarte un poco de crema por la zona en que quieras reducir la grasa, y acompañar este tratamiento con una dieta saludable y una rutina de ejercicio adecuada. Mantén este programa durante algunas semanas, y verás como los cambios comienzan a notarse.








