A veces me sorprende la cantidad de gente que me dice que no le gusta su empleo, y siguen allí mes tras mes, año tras año. Y aunque sé por experiencia propia que cambiar de empleo a veces es difícil y nos da miedo, créeme que vale la pena por estas razones.
¿Odias tu trabajo? Cambiar puede ser difícil pero vale la pena

1. Solo estás allí por el dinero
Sé que el dinero es necesario para comprar una vida cómoda. Pero una vida cómoda no es una vida feliz, y hay cosas que el dinero no puede comprar, como el sentimiento de realización personal o de que estamos haciendo algo importante en el mundo. Si solo estás allí por el dinero, quizás sea hora de que pienses en cambiar de empleo.
2. No te prepara para el empleo que realmente quieres

Cuando era adolescente estudié administración de empresas, pero cuando empecé a trabajar en ello me di cuenta que lo odiaba. El problema es que todo lo que tenía en mi curriculum eran estudios y experiencia en administración de empresas, por lo que los trabajos que conseguía eran todos del mismo tipo. Por eso mi mejor consejo es que si tu trabajo actual no te está preparando de alguna manera para el empleo que realmente quieres, busques hacer el cambio cuanto antes. Porque a medida que pase el tiempo será más difícil.
3. No estás utilizando tus dones y habilidades
Tal como dije más arriba, una de las cosas que nos hacen sentir más frustrados cuando estamos en un empleo que odiamos es que no tenemos la oportunidad de usar nuestros dones y habilidades. Y esto nos hace sentir sin propósito o incluso un poco inútiles, como si algo faltara en nuestras vidas.
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4. Te ata a una vida que tampoco te gusta

Casi todos terminamos, en mayor o menor medida, construyendo nuestra vida alrededor de nuestro empleo. Por eso tienes que deshacerte de un empleo que no te gusta, porque suele atarte a una vida que tampoco te gusta, repleta de rutinas, tareas y responsabilidades que te roban el bienestar y la energía.
Como conclusión, diría lo siguiente: ¡no dejes que un empleo que odias arruine tu vida! Sé que el cambio puede ser difícil, pero librarte de todo lo que comenté más arriba créeme que vale la pena.









