La rutina nos confiere tranquilidad y nos permite ser más eficientes. Sin embargo, si permitimos que el hábito ciego ahogue nuestra creatividad, no tendrá que pasar mucho tiempo antes de que estemos en serios problemas. Y es que la rutina puede llegar a ser muy empobrecedora e incluso atentar contra nuestra agilidad mental. Entonces, ¿qué te parece si realizamos algunos ejercicios para recobrarla?
Ejercicios de agilidad mental


A ojos cerrados
Te propongo un desafío; ¿qué tal si hoy te bañas con los ojos cerrados? Esto te permitirá, explorar el valor de tus otros sentidos –que suelen quedar opacados por la visión. Pero, por sobre todo, esta práctica sencilla te obligará a usar la memoria y activará neuronas que solían estar dormidas mientras te duchabas.

Mano menos hábil
Si tenemos dos manos, ¿por qué siempre usamos una? Revierte esta situación; empieza a valerte de tu mano menos hábil –si eres diestro, de la izquierda y si eres zurdo, de la derecha. Empléala para actividades sencillas, como comer o lavarte los dientes. Esto representará un gran ejercicio mental.

En voz alta
Leer en silencio es uno de los mayores placeres de la vida. Sin embargo, leer en voz alta también tiene lo suyo. De hecho, exige una mayor concentración y demanda otras habilidades. Por tanto, si quieres agilizar el funcionamiento cerebral, prueba esta actividad siempre que puedas.

Otros caminos
No vayas al trabajo siempre por la misma ruta; regálate la posibilidad de conocer otros caminos. Esto te permitirá entrar en contacto con otras realidades y ampliará tus horizontes. Y no hay nada como esto para agudizar la agilidad mental.

Nuevos lugares
Cuando la disposición del mobiliario en nuestro hogar permanece inmutable a lo largo de los años, nuestro cerebro comienza a empolvarse. Y es que este elabora una especie de "mapa" y se aferra a él para que puedas desplazarte sin llevarte las cosas por delante. Como consecuencia, cada vez que circulas por tu casa, se activan las mismas conexiones neuronales. Entonces, ¿por qué no cambiar los muebles de lugar?

Actividades desconocidas
Explorar nuevos ámbitos del conocimiento es un desafío apasionante –y estimula la agilidad mental. Así que embárcate en esta aventura; elige una actividad que te guste y que no has tenido tiempo de practicar e incorpórala en tu vida. Las posibilidades son casi infinitas: cocina, fotografía, danza, gimnasia...
Información recomendada: Ejercicios para recuperar la memoria.
Prueba una de estas actividades todos los días y tu mente se mantendrá ágil y sana. No te resignes a que el paso del tiempo necesariamente implica la decadencia total de la función cerebral: no tiene por qué ser así.









