El déficit de atención es un trastorno crónico que afecta a niños y persiste en la adultez. Este déficit abarca una serie de problemas, como la dificultad para concentrarse, la hiperactividad y el comportamiento impulsivo. En general, se suelen considerar los efectos del déficit de atención sobre el aprendizaje. Sin embargo, también tiene consecuencias sobre otras áreas, como la de los vínculos humanos. Ahora bien, ¿cómo afecta el déficit de atención en las relaciones?
¿Cómo afecta el déficit de atención en las relaciones?


Dificultad para escuchar
Las personas con déficit atencional no suelen ser susceptibles a la respuesta del otro. Por eso, en una conversación, tienden a pasar por alto las reacciones y respuestas del interlocutor, quien puede sentirse ignorado y poco valorado.

Olvidos frecuentes
El déficit de atención puede afectar las habilidades de organización y la capacidad de recordar. Esto puede desembocar en que se olvide de fechas significativas –como el aniversario de bodas o el cumpleaños de su pareja.

Imposibilidad de asumir responsabilidades
Quienes padecen déficit atencional suelen tener duras dificultades para asumir cualquier tipo de responsabilidades, como pagar cuentas en fecha o contraer compromisos, como el matrimonio o tener hijos.

Comportamientos impulsivos
Las personas con déficit de atención no tienden a pensar en las consecuencias de sus acciones. Esto puede dar origen a comportamientos irresponsables, como manejar a grandes velocidades con los niños en el auto.

Reacciones exageradas
Quienes sufren déficit atencional pueden perder la calma muy fácilmente y reaccionar de forma desmedida. Esta puede ser la raíz de grandes malentendidos.
Como hemos visto, si no recibe el tratamiento adecuado, el déficit de atención tiene un gran potencial destructor no solo de relaciones, sino incluso de matrimonios fuertes.







