Algunas cosas malas que nos hacen bien

Ya en otra ocasión, te mencionaba algunas de las actitudes más condenadas por la sociedad en los últimos años, que en realidad se ponían de tu parte al momento de cuidar tu salud. Estirarnos nos ayuda a quemar calorías, no excedernos en el uso de los productos de limpieza puede evitar inicios de asma en los más pequeños, tener alguito de “pereza” puede asegurarnos más años de vida y jugarse de vez en cuando un videojuego puede estimular el cerebro.

Sin embargo, aún quedan algunas de esas acciones criticadas injustamente que te traen beneficios grandiosos… ¡Veamos cuáles son!

Enviar mensajes de textos

¡Ni que lo digan! Cuando los jóvenes comienzan a teclear desenfrenadamente el celular para enviarse mensajes de texto, ya sea en la escuela o con la familia, es siempre mal visto. Se ha llegado a decir que los envíos de textos pueden crear actitudes antisociales. Pero, para gusto de todos los amantes de los “sms”, estudios en Reino Unido han demostrado que estos pueden ser una excelente herramienta a utilizar para comunicar todas nuestras emociones, por más explosivas que estas sean. En lugar que tu hijo adolescente te grite y te reclame a voz en cuello y te haga enfadar, te enviará un texto explicándote lo que siente y podrás leerlo con detenimiento para entenderlo… ¿Qué te parece?

El estrés

Aunque muchos lo catalogamos como la “enfermedad” del siglo, en realidad el estrés es un modo de respuesta del organismo ante los estímulos que causan ansiedad y tensión. Así, no te sorprendas si los expertos afirman que un poco de estrés en tu vida diaria puede hacerte bien. ¿Por qué? Por la adrenalina que experimentas en situaciones estresantes. Pero recuerda, todo exceso es dañino, así que no abuses de sus efectos.

Música a todo volumen

Cuantas veces no hemos escuchado música a todo volumen y hemos generado que más de uno nos ponga mala cara y nos apague el estéreo. Pues a todos los que alguna vez lo hicieron, podrás decirles en la próxima ocasión que la música “elevada”, al llegar a los 90 decibeles, llega a través de tus oídos a tu cerebro directamente a generar la liberación de hormonas que te harán sentir feliz.

Ahora que conoces la verdadera naturaleza de estos hábitos... ¿Empezarás a ponerlos en práctica? O ¿Seguirás diciendo que son nocivos?