Todos conocemos esa sensación de cuando el verano comienza a asomarse: las brisas de viento son más calurosas, ya no tenemos que salir a la calle con campera y bufanda y lo único que queremos comer es helado.
8 cosas que solo entendemos las personas que odiamos ir a la playa con toda el alma

Pero hay algo más del verano que mucha gente disfruta: las idas a la playa. Tomar sol, bañarse en el mar, todo parece ser muy placentero para algunos, mientras que para otros la playa es una de las mayores torturas.
¿A ti tampoco te gusta la playa? ¡Seguro te sentirás identificado con todo esto!
1. La arena se vuelve parte de nuestro cuerpo
Disfrutar de la playa es comprensible, pero ¿acaso hay alguien que disfrute de la arena pegajosa?
2. ¿Qué hay abajo del agua?
Bañarse en el mar no es demasiado agradable cuando no tienes idea qué es lo que estás pisando, especialmente cuando su textura es un tanto dudosa.
3. El sol es destructivo
A menos que uno vaya a la playa al atardecer, el sol es demasiado fuerte y nocivo para la piel ¿por qué exponerse tanto rato a él?
4. ¿Qué se hace en la playa?
Está bien, para algunos es divertido estar al sol, pasar un rato en el agua, pero, luego de 2 horas puede volverse muy aburrido.
5. El viento es muy molesto
Si tienes suerte, no habrá demasiado viento en la playa. Pero la mayoría de las veces el viento puede ser muy molesto que ni siquiera te permitirá tomar una buena foto.
6. El agua siempre está fría
Tal vez es parte de ser friolento, pero bañarse en la playa a veces supone atravesar un frío tan poco placentero que ni siquiera dan ganas de hacerlo.
7. Encontrar un espacio es un milagro
Por su gran (e incomprensible para algunos) popularidad, en la época de calor la playa está repleta de gente. Eso no solo hace ella un lugar que carece de privacidad sino que también se vuelve todo un desafío encontrar un espacio suficientemente grande y despejado para instalarse y relajarse.
8. Tenemos la piscina
Muchas personas a pesar de poder disfrutar de una piscina optan por ir a la playa pero ¿quién no prefiere la comodidad de una piscina? Lamentablemente somos muy pocos...
Como ves, no eres la única persona que no disfruta de la playa. Unos te dirán que es una locura no apreciar semejante regalo de la naturaleza, mientras otros te confesarán que ellos también detestan la manera en que la arena se les pega al cuerpo y lo poco que disfrutan sentir las texturas extrañas en el mar.
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