La mayoría de las personas viven bajo la creencia de que, si sus cuerpos no se ven como los de una revista, no son perfectos y por lo tanto no merecen amor ni cuidado. Muchas publicidades nos hacen creer que una vez que obtengamos ese cuerpo (incluso cuando es físicamente imposible) podremos sentirnos bien con nosotros mismos y seremos felices. Porque, ¿quién no obtiene el trabajo de sus sueños y encuentra a su media naranja una vez que sus abs se ven tonificados o su trasero es de acero? Pues...¡nadie lo hace! Será mejor que conozcas la realidad, porque el cuerpo ''perfecto'' podría traerte más frustraciones que satisfacciones y querrás saber de ellas antes de encontrarlas por ti mismo.
5 mitos sobre tu CUERPO que necesitas olvidar hoy para sentirte mejor mañana


Esa falta de amor que padece nuestro cuerpo cuando no está ''en forma'' viene acompañada de ciertas formas de pensar y conductas que deberías eliminar de tu vida si quieres sentirte bien con él de una vez por todas y deberías conocerlas.
#1 ''Si odio mi cuerpo será más fácil ''arreglarlo''"

Primero que nada, las imperfecciones son una condición humana y ningún cuerpo necesita un ''arreglo''. Siempre encontrarás algo que no te guste tanto de cómo te ves o cómo eres, pero esos son los rasgos que te definen y caracterizan como persona única, ¿por qué odiarlos?
No tiene ningún sentido odiar tu cuerpo, no encontrarás ninguna motivación allí, sino que te debilitará aún más para ser feliz. Tu cuerpo merece ser cuidado con 10 kilos más o 10 menos, da igual su peso, es uno solo y te acompañará durante toda tu vida; será mejor que tengas una buena relación con él.
Verás lo bien que se siente liberarse y aceptar el cuerpo que tienes.
#2 ''Si no odio a mi cuerpo, perderé el control sobre él''

¿Acaso tener el control de tu cuerpo es someterte a estrictas dietas y semanas de hambre? Todo lo contrario, eso es provocar un enorme descontrol y caos en él. En primer lugar, ''tener el control del cuerpo'' es un término que no debemos usar, ya que cada uno de nuestros cuerpos se comporta de manera diferente y tenemos que aceptarlo.
Ahora bien, si queremos cuidar su bienestar es necesario llevar una alimentación saludable y balanceada.
#3 ''Una vez que me deshaga de mi celulitis o de mis kilos, empezaré a amar mi cuerpo''

Esta es la mentira más grande que jamás te dirás a ti mismo. De lo único que tienes que deshacerte para poder amar tu cuerpo es del odio hacia él. Si pierdes esos kilos pero el odio permanece encontrarás otro aspecto de tu cuerpo al que atacar más temprano que tarde.
No se trata de arreglar o eliminar las imperfecciones, se trata de cambiar la forma en que las percibes.
#4 ''Si tengo el cuerpo ideal, mi trabajo y mi vida social serán mucho mejores''

La realidad es que vivimos en un mundo un poco superficial, pero ningún aspecto físico será más poderoso que una buena actitud. Tu pareja no te dejará si engordas 4 kilos, a tu jefe no le interesa si tienes celulitis y tus amigos ni siquiera notarán si tus brazos no están tonificados. Lo que sí alejará a tus seres queridos es tu comportamiento y tu visión negativa de lo que te rodea, ya que ese odio hacia tu cuerpo podría llevarte a sacrificar tu vida social.
Un cuerpo como el de modelo de revista no te hará una persona exitosa, lo que sí te convertirá en quien quieres ser es la confianza en ti mismo, el esfuerzo, la pasión y el trabajo duro. Pero no el trabajo en el gimnasio, sino en sentirte mejor contigo mismo.
#5 ''Mi cuerpo no es normal''

Si cada vez que encendemos la televisión o que caminamos por la calle lo único que vemos son carteles con personas de cuerpos ''esculturales'' es comprensible que a todos nos provoque cierta ansiedad. Pero ¿cuán reales son esas fotografías? Todo lo que vemos en la tele o publicidades atravesó un filtro de photoshop que lo volvió irreal.
¡Amemos nuestra esencia!, porque es la manifestación más pura de cada uno de nosotros y no hay medidas que puedan alterarla.
Será mejor que tengas en cuenta estas recomendaciones si no te sientes cómodo con tu cuerpo. Estás a tiempo de ahorrarte la mala expreriencia y optar por la única vía segura y satisfactoria que implica aceptar y amar tu cuerpo tal y cómo es. Y no lo olvides: el único músculo que debes tonificar para sentirte mejor es tu corazón.








