3 razones para NO comer rápido

Hablábamos de atracones hace poco, y no como una conducta desatendible, sino que como un desorden alimenticio a ser tomado en cuenta. Igualmente no todos los atracones son signo de un desorden alimenticio, aunque lo cierto es que pueden provocar un gran daño a tu digestión.

El comer rápido y vorazmente es un camino con probable destino en la obesidad, problemas digestivos o hinchazón. El ritmo rápido de vida no ayuda en nada, pero es importante tener en cuenta que si comes demasiado rápido no harás más que estropear tu salud. ¿Aún no estás convencido? Chequea estas tres razones que respaldan lo que digo.

1. Comer lentamente puede ayudarte a evitar hinchazones y a prevenir el sobrepeso. De hecho, este último está estrechamente ligado al comer vorazmente sin masticar bien la comida y sin tragar porciones pequeñas. Además, comer más lento hará que comas menos, tal como demostrábamos hace unos días.

2. Comer más lento mejorará tu digestión. Y esto no sólo implica evitar una pancita hinchada, sino que también evitar serios problemas digestivos tales como el mal funcionamiento del estómago y por consiguiente problemas intestinales.

3. Comer más lentamente te hará disfrutar realmente de las comidas, y lejos de tragarlas sin sentirles el sabor, te permitirá abrirle puertas a muchos nuevos sabores y aromas de platos a descubrir. Esto además se traducirá en entender la alimentación de otra manera, no sólo como un medio de satisfacer necesidades, sino que como un placer en sí mismo.