14 cosas que estamos dispuestas a hacer cuando tenemos antojo de algo dulce

No hay nada mejor que satisfacer un antojo. Aunque llueva, estemos a dieta o si acabamos de llegar del gym, cuando el estómago nos pide algo es muy difícil no escucharlo.

Si eres adicta a lo dulce probablemente te sientas identificada con estas 14 cosas que estamos dispuestas a hacer cuando tenemos antojo de algo dulce.

#14 Dejar la dieta

Una vez, no le hace mal a nadie ¿no?

#13 Salir de pijama a la calle

Es tanto el antojo que no importa la hora o el hecho de que estes en pijama, solo quieres algo dulce y harás de todo para conseguirlo.

#12 Pedir al delivery

No quieres salir pero necesitas solucionar tu antojo rápido así que llamas al delivery para que te traigan algo rico a casa.

#11 Cancelar el delivery e ir tú misma

Pero el delivery se demora y tu antojo no puede esperar así que lo cancelas y sales tú misma a conseguirte ese antojo dulce que buscas.

#10 Salir a la madrugada

Ya es tarde, el delivery está cerrado y no te queda otra que salir para satisfacer ese antojo. Y… ¡obvio que lo haces!

#9 Salir bajo lluvia

No te importa si truena o hay relámpagos, necesitas satisfacer ese antojo ¡YA MISMO!

#8 Ponerte a cocinar

No cocinas NUNCA pero de repente son tantas las ganas de comer algo rico que miras recetas para ver qué puedes cocinar.

#7 Prometer que luego te cuidarás

Estás a dieta o tienes una buena disciplina porque quieres bajar esos kilitos demás, sin embargo, cuando llega ese antojo no puedes controlarte. Así que prometes que el resto de la semana te cuidarás.

#6 Hacer cálculos

Necesitas justificar tu antojo así que empiezas a calcular las calorías de ese brownie y las horas de gym que puedes dedicar en la semana para poder darte ese gustito sin culpa.

#5 Tener una reserva de dulces

No es la primera vez que te pasa asi que cuentas con tu reserva personal de dulces en caso de emergencia. ¡Pero olvidaste que la otra vez te comiste el último que quedaba!

#4 Revisar toda la casa

Estás sola en tu casa y de repente te llegan esas ganas incontrolables de comer chocolate ¡y no hay nada! Revisas cuarto por cuarto no sea cosa que alguien haya dejado algo rico guardado...

#3 Estar dispuesta a hacer cualquier cosa

Pero no encuentras nada así que tomas coraje agarras el celular y llamas a tus hermanos o a tus padres pidiendo por favor que te compren algo. Incluso estás dispuesta a ordenar el cuarto o a cumplir con todas sus demandas si tan solo te traen ese CHO-CO-LA-TE.

#2 Tomarte un ómnibus para satisfacer el antojo

Tienes un antojo específico, no te sirve lo que te traigan de la tienda o lo que puedas encontrar en tu casa. Así que pacientemente te abrigas y te tomas un ómnibus hasta la heladería más cercana para comprar 1 litro de helado y llevarlo a casa.

¡Para ti sola, claro!

#1 Inventar excusas

Quieres sentirte sin culpa así que buscas maneras de justificar el tener que satisfacer ese antojo.

Porque llueve, porque estás estresada, porque te lo mereces… ¡cualquier excusa es válida!

No hay nada mejor que satisfacer ESE antojo, así que hazlo sin culpa, al otro día puedes recuperar el gym o empezar la dieta. ¡No necesitas excusas para darte un gustito de vez en cuando!

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