Una piel deslucida y ajada nos envejece. Pero siempre podemos actuar para protegerla, cuidando nuestra alimentación y adoptando los siguientes hábitos:
Cómo cuidar tu rostro a diario: consejos simples y prácticos para una piel radiante


Descansa bien

El recambio de células viejas por nuevas ocurre mientras dormimos. Así que prioriza descansar entre 7 y 8 horas. Así, le darás tiempo a la piel a que se regenere naturalmente.
Para favorecer el sueño:
- establece una rutina de sueño; procura ir a la cama todos los días a la misma hora.
- Aléjate de las pantallas cuando vayas a la cama y reserva este espacio solo para actividades relajantes, como leer.
- Modera tu ingesta de cafeína por las tardes.
- Cena liviano para que hacer la digestión no sea un peso para tu cuerpo.
Limpia tu rostro

Limpia tu rostro por las mañanas con un jabón de pH de neutro a ácido, como recomendó la dermatóloga Lucía Sanjinés Mannocci a VIX. Los jabones perfumados suelen ser alcalinos, por lo que no son los más indicados para la higiene del rostro.
Hidrata, hidrata... hidrata

Justo después de lavar el rostro, hidrátalo con emolientes o hidratantes, recomienda la dermatóloga (consulta con tu especialista para discernir cuál es el mejor para tu tipo de piel). Este es el momento justo para hacerlo porque con este producto tu piel podrá retener la humedad del lavado.
Usa protector antes de salir

Este producto no es solo para la playa. De hecho, deberías usarlo todos los días antes de salir de casa para protegerte del daño acumulativo e irreversible de los rayos del sol. Para simplificar tu rutina, puedes elegir pantallas compactas con color.
Nutre tu cuerpo con vitamina C

La vitamina C tiene un fuerte poder antioxidante, esencial para prevenir los efectos del envejecimiento. Por tanto, para empezar, asegúrate de consumir alimentos ricos en esta vitamina a diario (¡cítricos!).
También puedes usarla de forma tópica en tu piel, por medio de sueros con vitamina C. Estos son los más recomendados en Amazon.








