A pesar de que lloramos y pataleamos en el momento en que supimos que la temporada 7 de Game of Thrones empezaría más tarde y tendría menos episodios, la trama ha logrado conquistarnos de tal manera que pronto olvidamos la larga espera. Pero ahora que ha llegado a su fin, como buenos ansiosos que somos, ya estamos esperando a la octava como si faltara poco.
Oh, oh... tal vez debamos esperar más de la cuenta para ver la última temporada de GOT

Estamos acostumbrados a esperar un año entre una y otra temporada, pero lamento decirte que es posible que esta vez eso no suceda. Es momento de aprender que con esta serie no debemos acostumbrarnos a nada para así sufrir un poco menos.
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¿Cómo que hay que esperar más?

El clima es uno de los factores determinantes en la serie, tanto para la trama como para el propio rodaje, y ha sido el «culpable», en parte, del retraso de la séptima temporada. Teniendo en cuenta que el invierno llegó y con él también lo hizo el Ejército de los Muertos, la temporada 8 necesitará de más frío que nunca, y eso puede no tener las mejores consecuencias.
Si bien la próxima y última temporada aún no tiene fecha oficial de estreno, se espera que a fines de 2018 esté llegando a la pantalla de HBO, teniendo en cuenta que el rodaje podría terminar a mediados de marzo/abril. Pero a pesar de que siempre contamos con un atraso estimativo, esta vez puede que ese atraso se extienda más, tanto, que el estreno se daría recién a principios de 2019.

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Teniendo en cuenta que se vienen los últimos 6 episodios, que los Caminantes Blancos atravesaron El Muro y que no solo tenemos dos dragones de fuego sino un dragón de hielo, el trabajo de CGI y posproducción será muchísimo, así que es razonable que haya un atraso. De todas maneras, por el momento son suposiciones, y puede que los vientos cambien en lo que respecta al final de Game of Thrones que, a pesar de que se atrase, está cada vez más cerca y nos duele aceptarlo.






