Todos los que vemos Game of Thrones sabemos que hay muchas escenas en las que tenemos que hacer de nuestro estómago un poco más fuerte, de lo contrario, es imposible digerir tantos momentos sangrientos y muchas veces morbosos que vemos episodio tras episodio (sobre todo solemos ver la serie a la hora de cenar). Y por más que sepamos que es todo ficción, no deja de asombrarnos, y a los actores en medio del set les sucede algo parecido.
Kit Harington se puso realmente nervioso mientras rodaba una escena de Game of Thrones
Bueno, al menos Kit Harington no la pasó nada bien rodando algunas escenas, en particular una, en donde lo que tuvo que soportar le pegó donde más le dolía.
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Todo un desafío
Imagen HBO
Si hay algo que Jon Snow ha tenido que soportar más de una vez, han sido las muertes, incluso la propia. Curiosamente, el actor ha estado en muchas de las escenas más épicas y recordadas por los fanáticos, pero una de ellas le ha supuesto todo un desafío, aunque yo diría que más que eso fue un trago completamente amargo.
Muchos debemos estar de acuerdo en que el episodio de la batalla de los bastardos fue uno de los mejores de la serie, y al escena de la batalla en sí quedará para el recuerdo de todos, incluso para el de Harington, pero no lo rememora con la alegría que lo hacemos nosotros. El actor confesó que fue la escena que más le costó rodar, y que realmente logró aterrarlo:
«Tengo algunos miedos, como a las arañas, pero el peor de todos es la claustrofobia. Las multitudes me aterran, sentirme atrapado me desespera. En esa batalla tuve que estar apretado por quince irlandeses bien barbudos, fue muy difícil, casi entro en pánico».
Imagen HBO
Probablemente su terror ayudó a que ese momento en particular se viera tan real, tanto, que los que estábamos del otro lado de la pantalla nos comenzamos a sentir sin aire. Pero así como fue un momento tan complicado para él, es imposible no reconocer que fue el fin de una era, tanto por la muerte de Ramsey Bolton como por el cambio que ocurrió en el propio Jon.
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Hay que reconocer que Harington se merece que nos coloquemos de pie y le demos un aplauso, porque es admirable que alguien que sufre de claustrofobia haya salido ileso de un momento tan tenso. ¡Todo un profesional!
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