Todo esto le pasaría a tu cuerpo tras un año en el espacio
El 1 de marzo de 2016, el astronauta Scott Kelly y el cosmonauta Mijaíl Korniyenko retornaron a la Tierra tras pasar casi un año en la Estación Espacial Internacional. Ambos formaron parte de la misión « un año en el espacio» que buscaba investigar los efectos que esta estadía en el cosmos podría tener sobre el cuerpo humano.
Kelly, además, tiene un hermano gemelo quien también es astronauta, pero esta vez se quedó en tierra firme para poder comparar las diferencias en la evolución de ambos.
A medida que pase el tiempo, seguro este experimento arrojará más resultados, pero, por ahora, ya sabemos de algunos cambios que sufre el cuerpo humano tras un año en el espacio.

5. Volverías siendo más alto
¡Un boleto para el espacio ahora mismo, por favor! Cuando Scott Kelly retornó del espacio, había crecido unos 5 centímetros. Excelentes noticias para él, aunque quizás no tanto para su hermano gemelo que, al quedar en la Tierra, no creció nada.
La explicación está en que, al no estar comprimidos por la gravedad de la tierra, los discos intravertebrales de los astronautas se expanden, otorgándoles esos centímetros extra.
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4. Tus huesos y músculos se debilitarían
Puede que se hable de «caminatas espaciales», pero la realidad es que en la Estación Espacial Internacional los astronautas caminan bastante poco. Esto pude llevar a que sus huesos y músculos se debiliten. Los huesos, por ejemplo, ya no deben soportar el mismo peso que en la Tierra, lo que provoca que liberen calcio, lo que aumenta el riesgo de fracturas y la posibilidad de formación de cálculos renales.
3. Tu corazón se encogería
Al igual que tus huesos y músculos, tu corazón trabajaría menos en el espacio y, con el tiempo, eso podría llevar a que tu corazón se encogiera.
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2. Perderías el equilibrio, al menos por un tiempo
Nuevamente, la culpa es de la diferencia entre la gravedad en la Tierra y la Estación Espacial. Para equilibrarnos, utilizamos el oído interno, pero, al cambiar las condiciones de gravedad, este ya no funciona igual. Eventualmente, los astronautas en la ISS se acostumbran, pero esto solo significa que deben volver a adaptarse cuando retornen a la Tierra.
1. Podrías aumentar tu riesgo de padecer cáncer
Esta es probablemente la menos feliz de las consecuencias de viajar al espacio. Los expertos saben que los astronautas se ven expuestos a niveles de radiación por sobre lo normal y muchos temen que esto podría llevar a un riesgo de cáncer aumentado.
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