Los equinodermos están entre los animales invertebrados más comunes en el medio marino de prácticamente cualquier parte del mundo. En algunos sitios basta con entrar unos pocos metros mar adentro, a profundidades de unos pocos centímetros, para encontrarnos con algunas de las especies más usuales de este singular grupo, que pueden habitar incluso en los profundos abismos oceánicos. Te invitamos a continuación a conocer los cinco grupos que reúne el Phyllum Echinodermata.
Los equinoideos
Son los comúnmente llamados erizos de mar, y son quizás de los miembros más conocidos de los equinodermos. Se caracterizan por presentar la forma del cuerpo globosa o discoidal, aunque algunas especies pueden ser bastante aplanadas.
Se conocen más de 950 especies vivientes y son muy abundantes en las costas rocosas y zonas de arrecifes, donde cumplen una importantísima labor en el control de la proliferación de las algas, un exceso de las cuales puede causar graves daños al ecosistema.
Aunque en algunos sitios son excelentes manjares, su mayor fama está dada sin dudas por las peligrosas espinas de muchas de las especies, que pueden quedar enterradas en la piel y causar dolorosas heridas.
Los asteroideos
Aquí se encuentran las conocidísimas estrellas de mar, las cuales cuentan con cerca de 1800 especies descritas en todos los océanos. Las estrellas de mar son animales muy voraces, con la fuerza de sus brazos son capaces de abrir las conchas de los moluscos bivalvos y devorar el animal en su interior.
Muchas de sus especies tienen reproducción asexual, pudiendo regenerar una nueva estrella de mar a partir de uno de sus brazos que se haya separado del resto del cuerpo. En algunos sitios las estrellas de mar están en peligro debido a la extracción indiscriminada de que son víctimas por parte de personas que las emplean para confeccionar objetos de artesanía.
Los ofiuroideos
Las ofiuras o estrellitas frágiles como también se les conocen son muy frecuentes debajo de las piedras y en oquedades ocultas de la luz.
Presentan un disco central redondo y unos largos brazos muy móviles que emplean para la locomoción, la cual puede ser muy rápida en ocasiones. Estas extremidades son sumamente frágiles y se quiebran con facilidad, los cual puede ser empleado como medio de distracción si son perseguidas por algún depredador.
Un dato curioso: estos animales no tienen ano, por lo que sus desechos los expulsan por la boca. Existen especies depredadoras, otras que se alimentan de detrito del fondo y también de materia en suspensión en el agua.
Los holoturoideos
Son más conocidos como pepinos de mar y son para muchos los menos agraciados físicamente de entre los equinodermos, aunque existen algunas especies de gran belleza y colorido.
Presentan generalmente un cuerpo alargado y blando que recuerda a los gusanos incluso en sus movimientos. Su tamaño puede ser muy variable, existiendo especies muy pequeñas y otras que alcanzan varios metros de largo.
Muchas veces viven enterrados en el fondo marino y son muy importantes en la dinámica del mismo, ya que lo remueven constantemente y lo limpian al consumir grandes cantidades de arena a la cual le extraen la materia orgánica antes de expulsarla nuevamente al medio, realizando una útil labor de limpieza.
Los crinoideos
Son los equinodermos menos conocidos y a la vez los más antiguos de todo el grupo. Fueron muy abundantes en el Paleozoico con más de 5000 especies fósiles conocidas, pero actualmente sobreviven menos especies (casi 600).
Son llamados estrellas con plumas y también lirios de mar, debido a que algunas de sus especies presentan un singular aspecto de flor. Son animales filtradores que se pueden encontrar desde la zona intermareal hasta las grandes profundidades, donde pueden presentarse como un extraño jardín de pálidos colores que parecieran un paisaje extraterrestre.
¿Conocías los cinco grupos de equinodermos que existen? ¿Sabes quiénes son los gorgonáces o cuáles son los animales marinos más extraños?