El cambio climático está haciendo de las suyas en el mundo entero. Y si bien el calentamiento global nos afecta a todos, las zonas más frías se ven más perjudicadas. Si no lo combatimos, a finales del siglo las zonas de deshielo de la Antártida podrían aumentar en un 25 %. Pero... no todo está perdido: nuestras acciones y la de todos los países pueden hacer la diferencia.
¿Puedes imaginar una Antártida verde?
¿Cómo será el 2100?

Según la ABC la Antártida podría tener 17 267 kilómetros cuadrados de deshielo. Y eso puede repercutir en la biodiversidad del ambiente. «Podría significar que animales y plantas que antes habían estado aislados, de pronto tendrán la oportunidad de mezclarse. Los cambios son inciertos y profundos», explicó Aleks Terauds, investigador de la Antártida.
No solo eso, sino que otras especies que solían evitar ese lugar por el hielo podrían trasladarse y competir con las allí presentes.
Pero... el 2100 puede NO ser así. ¿Cómo? Incentivando nuestras pequeñas acciones para no contaminar el ambiente.
Una Antártida verde
Si pensamos en esta zona nos imaginamos algo completamente blanco. Pero, ¿qué pasaría si eso cambiara de la noche a la mañana? ¿Puedes imaginar una Antártida verde?
En el futuro, explicaron investigadores a la ABC, la península «podría ser más rocosa y verde». El musgo en esa zona está creciendo rápidamente producto del cambio climático y el hielo, poco a poco, desaparece.
¿Qué se puede hacer para evitar una Antártida verde?
Terminar inmediatamente con la emisión global de carbono —algo que algunos presidentes desean evitar— puede ayudar a detener el cambio climático y el deshielo de la Antártida.
El cambio climático ya está haciendo de las suyas en la Antártida. Pero si actuamos rápidamente podemos detener el proceso. Si todo sigue igual, habrá más zonas verdes en la Antártida y las especies se verán vulneradas. ¿Contamos con tu ayuda?