Luego de la historia que trató de escribir con Mark, Rubí se integró al palco con la ilusión de encontrar a su media naranja. En su primera puerta recibió a Carlos, quien de inmediato le contó lo que tanto le llama la atención de ella. Tras abrirse la puerta, parecía que ninguno de los dos esperaría a que todos cantaran "que sí, que sí, que no, que no".

En medio de la puerta de Rubert, Laura alzó la mano para sorprender a todos al decir que su corazón le estaba latiendo muy fuerte por otro integrante del palco. Tras tomar la mano de todos los caballeros, finalmente se reveló que quien la tiene encantada es nada menos que Darío.

La mexicana tuvo un nuevo llamado de Cupido con un flechado lleno de ritmo. Además de confesar cómo duerme, la amorosa dio detalles de lo que pasa con ella cuando no come durante una larga jornada. Sus compañeras del palco no la contradijeron e inclusive revelaron que da un poquito de miedo.

Después de su nuevo encuentro que sacó chispas, Olga y Daniel tuvieron una cita muy romántica que, entre otras cosas, sirvió para disminuir la tensión. Además, el amoroso contó un evento que realmente lo sorprendió y que lo dejó con el corazón latiendo sin control.

En la misma noche en que ella vino a flecharlo, la pareja tuvo la oportunidad de irse de cita y platicar sobre lo que buscan en la vida. Pese a la química que encontraron, Rubí señaló que hay un detalle que no comparten y que fue decisivo para continuar o no escribiendo una historia juntos.

Lo que parecía una relación con viento en popa, terminó solo como amistad y ambos hablaron de las razones para tomar esa decisión. Teresa explicó que Moisés logró sacar la bestia que lleva dentro, pues él hizo un comentario que no fue de su agrado.