En los últimos años, ver un partido de la Selección argentina se convirtió en una experiencia más bien.. traumática. Pocos recuerdan las veces en las que el equipo «jugaba bien» y son cada vez más los que, al final de cada partido, terminamos gritándole al televisor pidiendo que se vayan todos.

Falta mucho tiempo aún, pero el Mundial 2030 ya está en boca de todos. No solo ese año se cumplirá el centenario de la Copa del Mundo disputada en Uruguay, sino que además la Argentina, Uruguay y Paraguay buscan convertirse en triple sede de la copa.

Argentina y Uruguay están en busca de la clasificación al Mundial de 2018 en Rusia, pero, además, su objetivo es también otro: conseguir la sede compartida para el Mundial 2030.

Temporada a temporada nos encontramos que el pase o el salario de un jugador logra un nuevo récord. ¿Seguirá siendo así? ¿Cuál es el límite de un equipo de fútbol? ¿De dónde sacan todo ese dinero?

Rooney fue llamado por el entrenador de Inglaterra para entrenar de cara a los partidos clasificatorios para el mundial de Rusia 2018. Pero el jugador inglés decidió que ya no volverá a jugar por su país: «Fue fantástico que me llamaran para decirme que querían que volviera a la selección. Realmente aprecio eso. No obstante, después de haber pensado mucho, les dije que prefería retirarme definitivamente del fútbol internacional», explicó.

Él es uno de los mejores delanteros del mundo —y, además, es el ídolo del fútbol en Uruguay—. En Uruguay si nombras a Suárez te espera una sonrisa. No importa en qué cuadro se formó, a los uruguayos se les infla el pecho cuando alguien reconoce a Suárez. Sí, es un deporte, pero «no es solo fútbol». Para los uruguayos es mucho más y por eso el amor gigantesco que le sienten a Luis Suárez.