Hace 25 años el mundo sería testigo del estreno de películas que cambiaron la historia del cine hollywoodense. Romance, acción y hasta un anime marcaron un antes y un después, todos estos filmes llenaron de emoción, lágrimas y risas a los espectadores de 1995.

La alianza Disney-Pixar suele jugar con discretas temáticas adultas en sus filmes para niños. Hay que reconocer, que es una gran hazaña para que las generaciones más jóvenes entiendan situaciones difíciles de la vida real... y para que los adultos lloren a moco tendido o replanteen sus decisiones por completo.

Se ha dicho que la película de Deadpool (2016) reinventó el género de superhéroes y adaptaciones de cómics al presentar una trama adulta, con iguales dosis de violencia y humor con doble sentido, gracias a su calificación Rated R (solo para adultos). Pero eso es cierto solo en parte, ya que las películas basadas en cómics con calificación R ya existían desde mucho antes que el Mercenario Bocón apareciese en la pantalla grande.

A veces damos por sentado que todas las personas somos neurotípicas o que tenemos buena salud mental, pero eso no siempre es cierto. Tenemos que hablar de temas como la depresión o la esquizofrenia, para comprender estos padecimientos un poco mejor. En este sentido, el cine puede ser un gran referente.

A lo largo de la historia muchos artistas de espíritu transgresor y mayor o menor talento han utilizado el cine como medio para desafiar las normas y convenciones sociales, socavar las sensibilidades de la audiencia y cuestionar sus preceptos éticos y morales.

Jamie Dornan, mejor conocido por su papel de Christian Grey en Fifty Shades of Grey, adaptación fílmica de la saga de libros del mismo nombre, nos robó el corazón. Aunque fue el personaje de Grey el que lo catapultó a la fama en 2014, este hombre comenzó a "deleitar la pupila" de sus seguidoras desde que comenzaba este siglo.