Víctor Maytland en exclusiva: conocé al pionero del cine porno en Argentina

El cine porno es uno de los géneros más negados de la industria pero a la vez el más consumido en el mundo. Hay de todo y para todos los gustos, pero,  ¿ cómo se filma una película porno ? ¿Cómo mueve la industria nacional?

Entrevistamos a Víctor Maytland, el pionero de la industria de cine pornográfico en Argentina. Nació en 1947 bajo el nombre de Roberto Sena, pero por los tabúes de la época, filmó la primera película XXX de Argentina, bajo el apodo por el que aún hoy lo conocemos.

«Las tortugas pinjas» (así la llamó) fue rodada en los 90 y el éxito fue total. De hecho, se convirtió en la película porno más vendida de Argentina, el incentivo perfecto para que Maytland continuara en este camino. Dirigió 260 películas más, con los que ganó prestigio en la industria internacional y trabajó en la productora CineXlatino,​ de Los Ángeles.

Conocé su historia en primera persona.

—¿Cómo surgió la idea de incursionar en el cine porno nacional?

—Víctor Maytland (V.M): A mí el porno me aburría, sobretodo el de la década del 80, que era muy monótono y sin guión, entonces un día pensé: «Qué raro que no se hizo ninguna película XXX en el país, voy a hacerla yo».

Vi por la calle el cartel de Las Tortugas Ninjas cuando faltaban 15 días para su estreno, me parecía insólito y ahí fue cuando decidí que quería hacer una parodia basada en el cómic: « Las tortugas pinjas». Le agregué un toque bizarro a pesar de que todos me decían que estaba loco porque lo bizarro no iba a calentar. Error.

—¿Y a los actores cómo los conseguiste?

—V.M: Puse un aviso: «presentarse de 12 a 18, maduros, gente sin prejuicios para escenas eróticas de alto voltaje». Vinieron 795 hombres y 10 mujeres en una tarde; y ahí me di cuenta de lo difícil que iba a ser conseguir mujeres. Bueno, así arranqué.

—¿Cómo se filma una película porno?

— V.M : Como cualquier película, no hay diferencia. El cine en general cuando es de género tiene una temática que tiene que ser recurrente. Por ejemplo, una película de boxeo o karate es como una coreografía, vos sabés que cada tantos minutos tiene que haber una escena de pelea. En Rocky hablan, hablan, hablan y cada tantos minutos se pelean, que es por lo que la gente quiere ver la película. En el porno es igual: cada determinada cantidad de tiempo, tiene que haber una escena de sexo.

—¿Los actores están nerviosos?

— V.M : Mirá, por lo general no son actores de carrera, por lo que resulta más difícil hacer una escena no porno que una que sí lo es. Algunas veces contrato actores, pero no para que hagan porno, sino para que potencien la escena. Por ejemplo: hago que el actor sea un tipo que está triste porque cree que su esposa tiene un amante, que hable y que transmita que está mal, que llore. Y, acto seguido, la escena de sexo, que es entre su esposa y el amante.

El boom y la re-transformación

El boom de Víctor Maytland y de toda la industria del cine porno internacional fue hasta el 2010, año en que la llegada de internet a la mayoría de los hogares puso fin al género tal como era.

Actualmente hay muy pocas películas, ya que lo que verdaderamente mueve a la industria son los videos cortos. Es que es muy simple, en cualquier lugar que tenga acceso a wifi y con un dispositivo, podés acceder a una cartelera conformada por millones de videos de todo el mundo con alternativas para todos los gustos.

—Víctor, ¿cómo hiciste para ganarle a Internet?

— V.M : Hago fiestas en vivo, eventos de solos y solas; creé la Radio Hot Venus, la cual es online y tiene publicidad. En la radio hago 3 programas por semana: uno de cine, otro de deportes y otro de sexo; y  una vez por año, hago una película porno que vendo en los eventos que organizo, ya que ya no hay más distribuidoras.

—¿Cómo solventás las películas?

— V.M : Es como una cooperativa, a las actrices les pago con lo poco que puedo y las ayudo para que tengan publicidad. Los hombres lo hacen prácticamente gratis. Y yo hago el guion, la dirección, la iluminación, todo, excepto la cámara. 

Esto no es un problema solo de Argentina, esto es mundial. Las páginas porno tienen un millón de visitas por día, ahí es donde está el negocio. Yo la radio y las películas las hago por hobbie, porque guita no me dan. El porno tal como estábamos acostumbrados a ver -con guion, argumento y trabajo- murió.

Sobre su preparación

Víctor Maytland estudió cine en la Universidad del Museo Social Argentino e integró el Grupo Cine Liberación donde trabajó con Pino Solanas en la producción de películas con marcada orientación política, lo que tiempo después generó que se alejara de ese mundo, debido  al contexto de dictadura de aquella época. Se fue a Canal 9 y trabajó en Feliz Domingo y Calabromas.

Mucho antes, ya se autodefinía como «el nene de Cinema Paradiso» porque desde muy chico iba con su mamá al cine y veían absolutamente todas las películas. Quizá de ahí el origen su pasión.

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