Una madre busca ayuda para su hijo: perdió un ojo en un tiroteo y tiene una bala en la cabeza

Un adolescente fue baleado mientras iba en el asiento del copiloto del auto de su hermana, por un hombre ofendido a bordo de su camioneta que se molestó por pitarle tras haber hecho una maniobra peligrosa al volante.

Una de las cinco balas que lo impactaron quedó incrustada en la cabeza de Gabriel, de 14 años, quien además perdió un ojo y desde ese día se debate entre la vida y la muerte en un hospital de Dallas, Texas.

"Yo me estoy muriendo por dentro porque mi niño no merece estar pasando por esto y me duele verlo así en la cama todos los días”, cuenta afligida la madre del menor, Mirtha Robles.

Hasta el momento, el agresor sigue libre y las autoridades dice tener algunas pistas, aunque ninguna que permita arrestarlo y pasar de 20 hasta 99 años de edad e incluso ser condenado a la pena capital.

En la habitación de Gabriel, quien se encuentra en estado vegetal, hay decenas de cartas de amigos, familiares y maestros llenas de buenos deseos de que pueda recuperarse pronto.

“Yo no acepto esto, mi fe no me deja. Mi hijo se va a parar de esa cama, va a caminar y me va a decir ‘mami, vámonos para la casa’”, dice Robles afligida.

Ahora la familia ha abierto una cuenta de GoFundMe para tratar de recolectar todo el dinero necesario para solventar los gastos hospitalarios del menor.

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