Un hombre de 33 años, influencer en el mundo del fisicoculturismo, falleció el pasado 15 de julio en un gimnasio durante un entrenamiento de rutina.
La conmoción por la muerte del influencer que quiso cargar una barra de más de 400 libras y le rompió el cuello
El hombre, de 33 años, se había convertido en un gurú para sus 35,000 seguidores en Instagram, quienes seguían al pie de la letra sus consejos y rutinas de ejercicio. El propio gimnasio dijo en sus redes sociales que había llegado al hospital con el cuello roto y una comprensión crítica de nervios vitales que conectan el corazón y los pulmones.

El indonesio Justyn Vicky, convertido en un gurú para sus 35,000 seguidores en Instagram, quienes seguían al pie de la letra sus consejos y rutinas de ejercicio, falleció aplastado por una barra de 200 kilos, informó el propio gimnasio.
El Paradise Bell dijo en sus redes sociales que Vicky, quien también fungía como profesor en el lugar, estaba asistido por otro hombre al querer levantar la pesada barra en posición de sentadilla -un movimiento de rutina para él-, cuando el peso lo venció y le quebró el cuello.
A pesar de que los servicios de emergencia fueron llamados de inmediato y los paramédicos lo pudieron trasladar hasta un hospital, los doctores poco pudieron hacer por salvarle la vida, a pesar de ser sometido a una operación de emergencia.
El centro de salud le dijo a The Sun que Vicky había arribado al hospital con el cuello roto y una comprensión crítica de nervios vitales que conectan con el corazón y los pulmones.
“Hoy, nos reunimos para celebrar la increíble vida de nuestro querido entrenador personal y amigo, Justyn. Con gran pesar compartimos la noticia de su muerte, y sin embargo, nuestros ánimos se levantan por el profundo impacto que tuvo en todos y cada uno de nosotro”, se puede leer en la publicación el centro deportivo.
Tras darse a conocer la noticia, las redes sociales del hombre se llenaron de mensajes de sus seguidores y amigos, quienes expresaron sus condolencias y su agradecimiento por su “energía” y su “pasión genuina” para ayudar a otras personas.
“Transformó vida que nos conmovieron profundamente (…) y era un faro de inspiración, motivación y apoyo inquebrantable”, escribió uno de sus amigos, quien aseguró que cada sesión con Vicky "era mucho más que hacer ejercicio”.
Sobre el accidente, uno de sus amigos, le dijo al Bali Express que él solía ser precavido en los entrenamientos e incluso “aconsejaba a todos en el gimnasio que fueran cuidadosos y no sobrepasaran sus capacidades durante las sesiones”.
El doctor Chris Raynor, cirujano ortopédico y especialista en medicina deportiva, le contó al rotativo que los riesgos del fisicoculturismo han aumentado debido a la cantidad de influencers que se han adentro en el sector.
Raynor señaló que antes los atletas trabajaban su cuerpo solo como preparación para ciertas competencias y luego descansaban durante algunos meses, pero que ahora el furor de las redes sociales ha provocado que se quiera mantener un estado físcio todo el año.
“Lo hacen para mantener su presencia en redes sociales y siempre verse bien”, asegura el especialista, quien no dudo en expresar su preocupación, porque se ha establecido “la idea equivocada de que lucir en forma es lo mismo que una vida saludable”.
Para Ryanor, dentro de esta cultura influencer en el fisicoculturismo, “hay varios hábitos que pueden ser nocivos”.