Existen una serie de creencias que adoptamos cuando queremos perder algunas libras, que solamente provocan que nos estanquemos o que incluso ganemos centímetros.
En ocasiones cuando queremos perder peso, seguimos varias restricciones que resultan contraproducentes. Te presentamos una serie de mitos y errores que debes borrar de tu mente.
Shutterstock
PUBLICIDAD
2/12
Ingerir sin límite productos ‘light’. Este tipo de alimentos son los que han reducido una parte del contenido de sus nutrientes; sin embargo, no significa necesariamente que sea menor su contenido calórico.
Getty Images
PUBLICIDAD
3/12
Es un error muy común sobrepasarse con la ingesta de lo 'light', pensando que no engordarás, cuando en ocasiones se consumen más calorías con ellos.
Pavel Biryukov
PUBLICIDAD
4/12
Eliminar el pan y las pastas. Este mito surgió a partir de la creencia popular de que los hidratos de carbono engordan y que los tenemos que suprimir si queremos bajar de peso.
iStock
PUBLICIDAD
5/12
Los carbohidratos son la principal fuente de energía y, al restringirlos, podemos sentir cansancio, fatiga, irritabilidad y menor resistencia cuando se realiza actividad física. Por eso, lo importante es controlar el tamaño de las porciones.
Getty Images
PUBLICIDAD
6/12
Abandonar todo lo dulce. Los alimentos, además de nutrientes, nos brindan placer, por lo tanto, no es recomendable eliminarlos completamente.
Getty Images
PUBLICIDAD
7/12
Se pueden consumir productos dulces siempre y cuando sean en la porción justa. Además, cuando se prohíbe un alimento se aumentan los deseos de comerlo.
Shutterstock
PUBLICIDAD
8/12
Pasar hambre. Las dietas muy bajas en calorías no se pueden sostener por mucho tiempo, por lo que muy rápido se recupera el peso perdido.
Shutterstock
PUBLICIDAD
9/12
Además, si tienes hambre en todo momento el gasto energético disminuye y el metabolismo se hace más lento.
Shutterstock
PUBLICIDAD
10/12
Evita las dietas milagro. Con la mayoría de ellas logras resultados rápidos; sin embargo, en cuanto las dejas, ganas todo el peso perdido y hasta más.
Shutterstock
PUBLICIDAD
11/12
Una dieta exclusiva en frutas, como por ejemplo la de la manzana, debilita al organismo y después de un tiempo provoca el famoso efecto rebote.
Shutterstock
PUBLICIDAD
12/12
No cenar porque engorda. Es importante no saltarte ninguna comida, ya que esto disminuye el ritmo del metabolismo, el organismo quemará menos calorías y provoca que llegues a la siguiente comida con más hambre.