La tecnología avanzada ha permitido resolver otro crimen de larga data: el de Susan Lund, una madre de 25 años desaparecida la víspera de Navidad en 1992 cuando salió de su casa para ir a una tienda en Clarksville, Tennessee.
Una mujer desaparece en Tennessee y encuentran su cabeza en Illinois: el asesinato de Susan Lund
A Susan Lund, una madre de 25 años, la vieron por última vez la víspera de Navidad de 1992 al salir de su casa en Clarksville, Tennessee. Décadas después, por fin se ha resuelto este crimen, al menos en parte: se confirma que una cabeza hallada en Illinois es la suya.
La buscaron intensamente en los meses posteriores a la desaparición, pero nunca la encontraron. Era madre de tres niños.
Un mes después del suceso, dos niñas de 10 y 12 años encontraron una cabeza humana en un parque en el sur de Illinois a unas tres horas en coche de la casa de Lund.
En ese momento, algunas pistas apuntaban que podría ser la cabeza de Lund: estimaron una edad entre 20 y 50 y la muerte se habría producido solo dos o tres días antes de que las niñas la encontraran.
Sin embargo, la policía no pudo indentificar a la víctima, a la que llamaron “Ina Jane Doe". Ese caso y el de Lund han permanecido sin resolver durante casi treinta años.
Solo ahora, gracias a una investigación con tecnología forense, la policía ha confirmado que la cabeza es de Lund.
Así lo anuncio el sheriff Jeff Bullard del condado de Jefferson, en Illinois. Todavía, recordó, falta por aclarar quien mató a la joven.
"Nuestra misión sigue siendo encontrar la verdad sobre qué ocurrió a Susan. Seguiremos cualquier pista", dijo Bullard.
Los hijos "aliviados" a saber que no los abandonó
Una de las hermanas de Lund contó al diario local Southern Illinoisan que los hijos de la fallecida están de algún modo aliviados por esta noticia al comprobar que su madre no los abandonó.
El descubrimiento fue posible gracias a genealogistas que analizaron unas muestras de la cabeza en un laboratorio de Santa Cruz, California. Construyeron un perfil de ADN para su investigación, según un comunicado de la compañía Redgrave Research Forensic Services.
Para este trabajo se pidió una muestra de ADN a uno de los familiares de Lund.
Reyes, la hermana de la víctima, dijo que se confirma lo que la familia siempre pensó: "Tiene tres niños, era difícil de creer algunas de las historias que decían que se había ido. Nosotros siempre supimos que le había pasado algo".






