​​Hospital cobra $1,000 a una familia en una sala de emergencias pese a que el doctor nunca apareció

Una madre y un niño esperaron durante una hora y media a ser atendidos por un médico que revisara al menor, que había sufrido una quemadura. El especialista no llegó, pero el centro médico envió una factura de todas formas.

Video Le confundieron con un delincuente y fue encarcelado, ahora demanda a la policía por $500,000

Un hospital de Missouri envió una factura por 1,012 dólares a una familia inmigrante pese a que el doctor nunca apareció.

El pequeño Martand Bhatt se quemó la mano en la estufa de la casa en abril del año pasado. Su familia decidió llevarlo a la sala de emergencias para que fuera atendido.

PUBLICIDAD

Los padres del niño, Dhaval y Mansi Blatt, originarios de India, habían recibido consejos en su país de origen de evitar acudir a los hospitales estadounidenses precisamente por sus altos costos.

“La gente siempre me dijo que evitara ir a la sala de emergencias en Estados Unidos a menos de que me estuviera muriendo”, contó el padre, quien trabaja como científico y farmacólogo de la Universidad de Washington en St. Louis, a WBUR.

Aun así, el pediatra que normalmente atiende al niño recomendó a los padres que lo llevaran a un hospital tras ver una fotografía de la quemadura del menor.

Fue entonces que la madre del niño lo llevó al hospital infantil SSM Health Cardinal Glennon, donde les dijeron que esperara en la sala de emergencias. Una enfermera revisó los signos vitales del menor y miró su herida, y dijo que un cirujano iría para realizar un diagnóstico.

Pasó más de una hora, y al ver que el médico no llegaba, Mansi decidió volver a casa con su hijo. El hospital llamó para hacer una cita con el doctor, pero para entonces ya no era necesaria pues la quemadura había sanado.

Para sorpresa de los padres, una factura llegó poco después. El hospital cobró $1,012 por "los servicios". El servicio de seguro contratado por el empleador del padre, UnitedHealthCare, negoció pagar $898.92, por debajo del plan de los Bhatt, que tiene un deducible a partir de los $3,000.

Lo ocurrido refleja cómo el solo hecho de registrarse en una sala de urgencias puede causar cargos a los pacientes así no hayan visto a un médico durante la espera.

PUBLICIDAD

Dhaval Blatt dijo a National Public Radio (NPR) que su hijo no recibió atención médica. “Mi mujer condujo por 45 minutos para llegar a esa sala de emergencias y estuvo esperando por una hora y media, y en ese tiempo lo único que pasó es que una persona revisó los signos vitales del niño. Eso ya lo sabíamos. Es ridículo y poco ético”.