Adultos Mayores
En imágenes: ellas cuidan de adultos mayores, estas son sus historias
Atender a alguien de la tercera edad es un trabajo a tiempo completo y estresante que realizan día a día estas mujeres, pero hay programas que las ayudan a aliviar esa carga física y emocional.

De unos 40 millones de cuidadores familiares que hay en el país, 21% son latinos. Belkis Nieto es una de ellas. Desde que diagnosticaron con Alzheimer a su esposo, se ocupa de él. “Sabía que no podría sola, que iba a necesitar ayuda”, dice. Para ella, pertenecer a un grupo de apoyo fue la clave para educarse sobre la enfermedad y atender mejor a su marido.
Ana María Rodríguez
"Jamás en la vida pensé que caería en esta situación porque mi esposo siempre estuvo bien activo", dice Nieto. Cada vez más familias asumen la labor de atender a un pariente con Alzheimer. La data de los CDC revela que, mientras la cifra de decesos por Alzheimer en hospicios descendió a la mitad entre 2004 y 2014, el porcentaje de personas que fallecían de Alzheimer en casa subió de casi 14% a 25%.
Ana María Rodríguez
La carga psicológica, física y económica sobre los cuidadores puede llegar a ser devastadora, por eso hay programas destinados a ayudarlos. Nieto se enteró del programa Respiro (Respite Services) en el grupo de apoyo al que pertenece. Esta iniciativa paga para que una cuidadora profesional acompañe a su esposo por cuatro horas diarias, en las que ella aprovecha para ir al gimnasio, al mercado o a la farmacia. "Los ejercicios me mantienen más activa y sobre todo mentalmente más receptiva y más alerta para cuidarlo a él", dice.
Ana María Rodríguez
Nancy Aponte recibió una ayuda invaluable de Alejo Conde y su esposa cuando llegó a Estados Unidos. La trataron como una "hija adoptiva". Por eso, ella no dudó en ocuparse de Alejo cuando su esposa falleció. Antes de que él recibiera el diagnóstico de Alzheimer ella notó cambios en su comportamiento. “Había muchas cosas que yo no sabía manejar, que yo no lograba entender”, cuenta.
Ana María Rodríguez
De su mano, Alejo aceptó ir cada mañana a SunnySide Community Services, un centro comunitario que ofrece programas para adultos mayores en Nueva York. “A Alejo le encanta bailar”, cuenta Aponte con alegría y añade que ella aprendió a manejar mejor la enfermedad en las capacitaciones que recibe en ese lugar.
Ana María Rodríguez
Desde hace cinco meses, Elsa Elvira, una cuidadora profesional, trabaja con Alejo y lo acompaña de lunes a viernes. Para ella es indispensable "tener mucha paciencia, mucha comprensión, caridad y misericordia" cuando se cuida de adultos mayores.
Ana María Rodríguez
Elsa Elvira se inició en este oficio hace ocho años. “Yo pienso que este tipo de profesión no hay que hacerlo por ganar dinero, sino por que realmente sale de tu corazón”, dice.
Ana María Rodríguez
Tania Yanes cuida a su mamá, Blanca Rosa Rivera, quien tiene Alzheimer. "Es normal deprimirse cuidando a una persona con esta enfermedad", confiesa. A la carga emocional, se le suman las preocupaciones económicas. En promedio, una familia latina gasta 44% de su ingreso anual en cuidar de sus parientes, según un reporte de 2016. El gasto mensual de su propio bolsillo es de 7,000 dólares o más, dependiendo de si viven con ellos en casa o los cuidan a distancia.
Heidi de Marco/Kaiser Health News
Dos veces al mes, Tania asiste a un grupo de apoyo de cuidadores en Canoga Park, California. Las sesiones la han ayudado mucho no sólo a atender mejor a su mamá, sino a a sobrellevar el estrés que a veces siente al ser la responsable de ella.
Heidi de Marco/Kaiser Health News
En una encuesta de AP y NORC Center for Public Affairs Research, 49% de los cuidadores hispanos dijeron que sus ahorros se habían reducido por cubrir los gastos de cuidar a un familiar.
Heidi de Marco/Kaiser Health News
Los gastos se multiplican si se decide recurrir a los servicios de un hospicio como lo hace Bárbara Márquez. Su mamá tiene 85 años y es residente del residente del Sagebrook Senior Living Home en Carmichael, California.
Heidi de Marco/Kaiser Health News
"La decisión de trasladarla a un centro de asistencia fue muy difícil para la familia", dice entre lágrimas.
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