La mujer había dejado abierta la puerta de su casa en Ocala, Florida, para que sus nietos entraran y mientras estaba en la sala escuchó un golpe. Fue hasta la entrada y un hombre asustadizo aunque de buenos modales le pidió usar el teléfono porque, le dijo, estaba en problemas.
Una mujer de 63 años convence a un reo prófugo de entregarse a la policía
Revantae Williams tocó la puerta de la casa de la mujer a quien pidió el teléfono para hacer una llamada y esconderse en el patio trasero, pero ella lo urgió a rendirse y terminó entregándose a la policía. Luego se arrepintió de haber escapado porque su salida de prisión estaba programada para dentro de un año.


Fue así como esta señora de 63 años le permitió su teléfono móvil a Revantae Williams, de 24 años y de raza negra, quien hacía apenas 44 minutos había escapado de un Centro de Reingreso.
Williams telefoneó a su esposa, se supo más tarde según versión de la policía. La mujer escuchó la conversación en la que el hombre le pedía que lo fueran a buscar; luego logró oír que la otra persona le decía que no iría y que se entregara a las autoridades.
La llamada terminó y el hombre le preguntó a la señora si podía esconderse en su patio trasero. Ella le dijo que no y lo urgió a rendirse. Ella continuó hablando con él sobre la mejor opción para él, y fue cuando decidió hacerlo.
"(Hablamos sobre) cómo lo haría y cuál sería la mejor manera de entregarse", dijo la mujer, citada por el periódico Ocala Star-Banner.
Cuando la policía llegó al lugar, Williams levantó las manos y ella lo acompañó hasta afuera. Se entregó al agente policial Carlos Ruiz.
Había escapado cuando los empleados del Departamento de Correccionales esperaban en el Centro de Reingreso para transportar a otro preso y Williams, que no estaba esposado ni encadenado, salió corriendo por la puerta. Sus zapatos fueron encontrados en la acera cerca de la entrada principal.
El Centro de Reingreso aloja y mantiene reclusos inscritos en programas de trabajo. Mientras los presos están allí deben acatar reglas y regulaciones y deben volver en la noche para un conteo.
Williams, que cumple una condena por hurto mayor, posesión de armas de fuego y drogas, lamentó huir porque debía ser liberado de la prisión en menos de un año.




































