El rey de España pide al líder del PSOE formar un nuevo Gobierno

España lleva cerca de un mes y medio con un gobierno en funciones desde que las últimas elecciones generales del 20 de diciembre no dieron a ningún partido la mayoría necesaria para formar un nuevo ejecutivo.

Ahora, y tras la renuncia del líder del Partido Popular y presidente en funciones, Mariano Rajoy, a intentar formar gobierno por la imposibilidad de reunir los apoyos suficientes, el rey Felipe VI le ha pedido al líder del PSOE, Pedro Sánchez, que intente configurar un nuevo gobierno.

Con este movimiento, el rey de España trata de desbloquear una situación que, de continuar, llevaría a la convocatoria de nuevas elecciones.

Pedro Sánchez puede comenzar ahora conversaciones con los diferentes partidos para poder configurar a su alrededor una mayoría suficiente que le permita superar una votación en el Parlamento español. Pero no será fácil. Sánchez, de 43 años, ha anunciado que comenzará los contactos este miércoles sin excluir a ninguna formación política. Para alcanzar su objetivo se ha dado un plazo de un mes.

"Yo voy en serio, creo que los españoles se merecen un gobierno, espero que todos estemos a la altura de la responsabilidades", destacó Sánchez tras el ofrecimiento del monarca.

Pese a que el líder socialista ha sostenido que está decidido a formar un ejecutivo "progresista" va a tener dos principales problemas: el numérico y su propio partido.

Los diputados con los que cuenta el PSOE (90 del total de 350) quedan muy lejos de la mayoría necesaria. Para ser investido presidente de España, Pedro debe conseguir la mayoría absosuta (176 votos). Si en una primera votación no alcanza esa cifra, podrá serlo simplemente si logra un mayor número de votos a favor que en contra.

Con esta matemática, el joven político necesitará como mínimo otros dos grupos en los que apoyarse. Uno de ellos no será el Partido Popular, el vencedor de las elecciones. Pedro Sánchez ha rechazado en numerosas ocasiones esa posibilidad.

En tercera posición quedó con 69 escaños el partido de izquierdas Podemos, liderado por Pablo Iglesias, y que ya ha realizado una oferta para poder sumarse a ese gobierno progresista del que habla el líder del PSOE. En su proposición, Podemos pedía al PSOE la vicepresidencia y varios ministerios.

Para alcanzar la mayoría absoluta (176 escaños) necesitaría igualmente contar con los votos de Ciudadanos, que obtuvo 40 escaños. Sin embargo, Pablo Iglesias ha rechazado cualquier acuerdo con la formación de Podemos.

Si Sánchez desecha la posibilidad de apoyarse en Ciudadanos, deberá buscar el apoyo de otras formaciones -además de Podemos- como los comunistas de Izquierda Unida o partidos nacionalistas.

Pero además de esta aritmética de curules, Pedro Sánchez también tendrá que hacer frente a su propio partido. No son pocas las voces que dentro de su formación se oponen a cualquier tipo de pactos con Podemos, al verlo como un partido que puede "robarles" el electorado. Además, consideran algunas de sus propuestas -como la posibilidad de celebrar un referéndum sobre la independencia en Cataluña- como inasumibles.