El centro federal pretende albergar a unos 1,000 menores, entre ellos niñas de 17 años o menos y niños menores de 12 años. La meta de las autoridades es que pasen allí entre 7 y 10 días, en los que serían reunificados con sus familias. Los menores van a ser sometidos a una evaluación médica, además recibirán ropa, artículos de higiene y alimentos.
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