MOUNTAIN VIEW, California .— La cabeza gigante de un Warren Buffett de cartón asoma por el cuello de una camiseta promocional con el logo de iBillionaire en medio de una expo de 500 Startups, una de las aceleradoras de startups más influyentes de Silicon Valley.
Ahora hay una app que quiere ayudarte a ser un multimillonario como Warren Buffett
Una aplicación de un ecuatoriano y un argentino permite a cualquier persona en cualquier país comprar las mismas acciones que los inversionistas más famosos.

El multimillonario inversionista, uno de los hombres más ricos del mundo, es famoso por su habilidad para comprar las acciones de las empresas que entregan un buen retorno de inversión a largo plazo.
Su versión de cartón está ahí para explicar el concepto de esta aplicación para celular, creada por un ecuatoriano y un argentino, que permite a cualquier persona en cualquier lugar del mundo comprar las mismas acciones que los inversionistas más famosos.
“Muy poca gente en Latinoamérica tiene cuentas de inversión en Estados Unidos”, explica el ecuatoriano Raúl Moreno, ex asesor financiero en un banco de inversión en Miami. “Ahora la puedes abrir desde cualquier lado con tu celular”.

Moreno y su socio Alejandro Estrada presentaron este viernes su empresa en el Demo Day de 500 Startups. Los demo days son jornadas en que las aceleradoras del Valle presentan a las decenas de startups que acaban de pasar por su programa ante inversionistas, medios de comunicación, empresas que podrían comprarlas y posibles clientes o socios.
iBillionaire es novedosa por su costado tecnológico, ya que permite abrir una cuenta de banco y comenzar a comprar acciones desde el teléfono, pero también porque abre la inversión en la Bolsa a un público global que no está acostumbrado a tener esa clase de oportunidad.
Estados Unidos tiene un público inversionista más desarrollado, donde una población masiva de clase media invierte en acciones.
“Acá la toman como un hecho”, dice Moreno. “Allá (en América Latina) no hay cultura inversionista. No debería ser solo para los ricos, aquí en Estados Unidos casi todo el mundo tiene inversiones”.
Los emprendedores creen que tienen la oportunidad de hacer un negocio mundial con esta app. En China, por ejemplo, los mercados de valores se están haciendo más sofisticados.
Estrada, el socio argentino, fue uno de los fundadores de Dinero Mail, una empresa de pagos en internet que luego vendieron a la gigante sudafricana de internet Naspers. También es cofundador de Moni, una aplicación de pagos y préstamos online que opera en Argentina y México. Además, acaba de crear en Argentina el fondo de inversión AR FinTech de 5 millones de dólares para startups tecnológicas en el sector financiero, con aportes de bancos argentinos.
Pero la diferencia en este, su tercer emprendimiento, es su potencial y su ambición.
“Es la única empresa en que estoy —dice— que es global desde el inicio”
El truco para que funcione iBillionaire es que los inversionistas en Estados Unidos deben reportar qué acciones tienen a las autoridades cada tres meses. El software que desarrolló iBillionarie analiza los documentos que presenta gente como Buffett para saber dónde invierten y subir esa información a la aplicación.
Los usuarios eligen el perfil de uno de los milmillonarios (“billionaire” en inglés) para copiar su filosofía de inversión: por ejemplo, una de largo plazo como la de Buffett, un inversor “activista” —que se mete en la administración de las empresas— como Bill Ackman, o la de Carl Icahn, que compra grandes cantidades de acciones de empresas líderes.
“Te da confianza para empezar —dice Moreno—. ‘Estoy siguiendo a gente que sabe’”.
La app compra las acciones en forma automática. El usuario puede decirle que tiene 100 dólares para gastar y los distribuye en las acciones correspondientes, aun si cada una cuesta más que eso (una acción de Amazon cuesta unos 700 dólares esta semana).
Para medir el interés de los usuarios, los emprendedores lanzaron un instrumento de inversión en acciones, el índice iBillionaire, que replica las inversiones principales de los multimillonarios, pero que sólo se podía comprar a través de un banco tradicional. Recaudaron 60 millones de dólares, con lo que —dice Moreno— comprobaron que hay interés por su servicio.
Pero el desafío que enfrentan es educar a un público que no entiende ni conoce la oportunidad de invertir en Bolsa.
La aplicación lanzó en modo de prueba hace cuatro meses. Ya tiene 1,500 clientes en Estados Unidos y 2,500 registrados en otros países, que están en el proceso de abrir su cuenta.
“Para una empresa chiquita, que recién empezó, es un montón”, dice Moreno.
La empresa, que arrancó con una inversión de 2 millones de dólares, tiene seis empleados y sus fundadores decidieron quedarse en San Francisco luego de completar el programa de 500 Startups. Están buscando una ronda de capital semilla de 2 millones más para crecer, empezando sobre todo por México. Estrada y Moreno se han reunido con fondos de capital de Silicon Valley y de Asia, entre otros.
“Queremos conseguir los primeros 10,000 clientes, es para expandir el equipo y las operaciones”, dice Moreno.
Todo empezó, dice Moreno, porque cuando renunció a su trabajo en el banco de Miami quiso invertir en Bolsa.
“Era difícil saber en qué invertir”, cuenta. “Si yo, que estudié finanzas y trabajé en un banco, no sé qué hacer, ni se diga alguien que no sabe”.







