Robaron decenas de armas en saqueos a trenes en Los Ángeles y temen que las tiene una violenta pandilla

Las autoridades habían mantenido en secreto el robo de al menos 82 armas de fuego durante saqueos recientes a trenes de carga que pasan por Los Ángeles, California. El problema se reveló hace unos días, cuando el jefe de la policía de esa ciudad lo informó al panel civil que gobierna la agencia.

La Policía angelina (LAPD) sospecha que una peligrosa pandilla esté detrás de dicha actividad criminal y que incluso el asesinato de un pandillero el pasado 16 de agosto haya resultado de una disputa por un lote de armas robadas, informó el diario Los Angeles Times citando fuentes anónimas.

“Estas armas estaban desprotegidas, desprotegidas... Dios sabe cuántas armas se han robado así”, dijo al mismo medio el capitán Germán Hurtado, quien supervisa la División Hollenbeck del LAPD, donde se encuentran las instalaciones ferroviarias que han experimentado los atracos.

"Tengo 24 años en el LAPD, soy exmilitar, tengo autorización secreta y tengo que esperar 10 días para obtener un arma de fuego nueva y estos tipos están entrando en estos contenedores sin candados y obteniendo armas”, agregó Huerta en la entrevista con el periódico.

La desaparición de todo este armamento está ligada a un aumento de más del 160% en robos a trenes en el condado de Los Ángeles, según datos de la empresa de transporte ferroviario Union Pacific. Solo en octubre pasado se elevó un 356% en comparación con el mismo mes de 2020.

Los ladrones esperan a que los trenes se detengan a cargar en una estación cercana al centro de Los Ángeles para abrir los contenedores y tomar productos elaborados en Asia que llegan al complejo portuario San Pedro-Long Beach para ser distribuidos a millones de clientes en todo el país.

En un principio se informó que robaban artículos de valor: electrónicos, ropa y muebles. Hasta ahora se sabe que también buscaban rifles, pistolas, ametralladoras, escopetas y balas de todos calibres.

La policía tiene por el momento una lista de 82 armas extraviadas, pero teme que el número sea mayor. La Buró de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF), que participa en la investigación, no se ha pronunciado al respecto. Mientras que Union Pacific declinó comentar sobre este tema.

El primer indicio del robo de armas en los trenes se registró en agosto pasado, cuando policías arrestaron a dos personas en Lincoln Heights, un barrio hispano en el noreste de Los Ángeles, con dos pistolas calibre .22 nuevas. Contrastaban con las armas desgastadas que suelen decomisar.

Dos días después detuvieron a otra persona con una pistola en las mismas condiciones. Tras conectar ambos incidentes los detectives descubrieron que provenían de un lote de 36 pistolas reportadas desaparecidas y que fueron enviadas en tren al estado de Tennessee, según Los Angeles Times.

Uno de los arrestados confesó que el arma había sido extraída de un contenedor en Lincoln Heights y agregó que hasta le ofrecieron una escopeta nueva, pero no tuvo suficiente dinero para comprarla.

Agentes federales tomaron unos días después la custodia de dos sospechosos que tenían dos escopetas, las cuales eran parte de un envío perdido de 46 armas de ese tipo, informó el mismo diario.

El asesinato de un pandillero

Los detectives del LAPD creen que la pandilla Metro 13, ligada a la banda carcelaria Mafia Mexicana, ha orquestado los robos de armas de los contenedores.

Una de sus líneas de investigación es que uno de los miembros de ese grupo, Leopoldo Esquivel, alias ‘Boxer’, fue asesinado a tiros por una disputa por un lote de armas que desapareció en agosto pasado, cuando se dispararon los saqueos a los trenes.

Esquivel, de 34 años, recibió un disparo en la cabeza y otro en el torso cerca de la esquina del bulevar Valley y Block Place. Fue transportado a un hospital local, donde perdió la vida. La Mafia Mexicana intervino para que no escalara la violencia por la muerte de ‘Boxer’, informó Los Angeles Times.

El saqueo masivo, que ocurre incluso a plena luz del día, representa una pérdida de 5 millones de dólares en los últimos doce meses, señaló Union Pacific. A la par de los robos de artículos adquiridos en Amazon, Walmart y otros minoristas, algunos empleados de Union Pacific han sido víctimas de agresiones físicas y robos a mano armada mientras realizan sus funciones moviendo los trenes.

El gobernador Gavin Newsom participó hace unos días en una limpieza de las vías ferroviarias. “Lo que sucedió en este tramo del ferrocarril Union Pacific es inaceptable”, dijo en un comunicado. “Estamos comprometidos con un enfoque de todo el gobierno para prevenir robos, enjuiciar a los delincuentes involucrados y limpiar las comunidades locales”, subrayó.

En Los Ángeles hay 275 millas de vías ferroviarias, nueve instalaciones y 1,600 empleados de Union Pacific, incluyendo policías propios que patrullan con la ayuda de drones.

La compañía instaló vallas especializadas y colocó sensores que detectan intrusos cerca de los contenedores, pero los hurtos no se han detenido. Desde agosto , el LAPD realizó 128 arrestos, pero solo un puñado de los detenidos han sido procesados legalmente.

En una carta enviada en diciembre a la oficina del fiscal del condado de Los Ángeles, Adrián Guerrero, director general de asuntos públicos de Union Pacific, asegura que menos de la mitad de los sospechosos son acusados por allanamiento, un delito menor, y algunos son liberados en menos de 24 horas sin pagar fianza.

La empresa advierte que contempla desviar la ruta de sus ferrocarriles para no pasar por Los Ángeles.