Tras la operación del martes para desarticular las barricadas levantadas por los ciudadanos en rechazo al presidente Daniel Ortega en Masaya que dejó al menos tres muertos, paramilitares del gobierno tomaron el control de esa ciudad aledaña a Managua. Ahora, los vecinos tienen que hacer su vida cotidiana entre estos hombres armados y que cubren sus caras con pasamontañas.