SAN JOSÉ, California. – La mujer acusada de participar en el secuestro del bebé Brandon Cuellar a finales de abril, pretendía quedarse al menor para hacerlo pasar como si fuera suyo y además estaba involucrada en un triángulo amoroso donde usaba el pequeño para presuntamente recibir dinero de una de sus parejas.
Un triángulo amoroso, el motivo detrás del secuestro del bebé Brandon Cuellar en San José
Un oficial de la Policía de San José testificó en la corte que Yesenia Ramírez, una de las acusadas del rapto del menor Brandon Cuellar en abril pasado, tenía dos parejas sentimentales y a una de ellas le había hecho creer que el bebé era el hijo de ambos.

La revelación forma parte del testimonio del oficial de la Policía de San José, Eduardo Reyes, uno de los primeros en interrogar a Yesenia Guadalupe Ramírez, de 43 años, quien junto a José Ramón Portillo, de 28 años, planeó el rapto que finalmente se llevó a cabo en la casa de la abuela del menor el 25 de abril.
En una audiencia preliminar realizada este lunes en la Corte Superior del condado de Santa Clara, el oficial Reyes indicó que Yesenia Ramírez y su novio José Portillo mantenían una relación sentimental, pero la acusada también tenía otro novio, identificado como Francisco Márquez, a quien presuntamente engañaba con su cómplice.
El agente interrogó a Márquez dos días después del secuestro del bebé Brandon y el hombre le reveló que Ramírez le había dicho que estaba embarazada de él y había dado a luz en marzo pasado. Cuando Márquez cuestionó a Ramírez sobre el paradero del menor, ella lo engañó diciéndole que aún estaba en el hospital.
Para convencerlo, señaló Reyes en su testimonio, Ramírez presuntamente le mostró a su pareja fotos del bebé Brandon, asegurándole que era el hijo de ambos y que lo quería llamar Ángel. En entrevista con Noticias Univision 14, Márquez dijo que los oficiales le preguntaron también sobre la ayuda económica que le había brindado a Yesenia para cuidar al bebé.
Yesenia Ramírez y Francisco Márquez: una relación llena de mentiras
Yesenia Ramírez y Francisco Márquez habían estado en una relación intermitente por cerca de cuatro años, según los abogados de la defensa. Durante su interrogatorio, Márquez le dijo a la Policía que Ramírez le mentía constantemente, pero él seguía a su lado porque “estaba enamorado”.
En una ocasión, de acuerdo con el testimonio del oficial de la Policía de San José, Márquez regresó a San José después de un viaje de trabajo en Los Ángeles y cuando llegó a la casa de Yesenia, José Ramón Portillo estaba dentro y le cerró la puerta en la cara.
“¿La atrapó siendo infiel, básicamente?”, preguntaron los abogados. “Es correcto”, respondió Reyes.
Las mentiras de Yesenia Ramírez presuntamente iban más allá, pues en varias ocasiones le había inventado historias sobre otros embarazos falsos antes del secuestro del bebé Brandon, incluyendo que había tenido gemelos de él pero los Servicios de Protección Infantil se los quitaron y los dieron en adopción luego de un accidente vial cuando intentó regresar a los Estados Unidos después de ser deportada.
Reyes testificó que tras el arresto de Ramírez le encontraron fotos del bebé Brandon en su teléfono que luego le mostraron a Carolina Ayala, la madre del menor, y ella confirmó que se trataba de su hijo. Según el oficial, Márquez no tenía idea que Yesenia había secuestrado al bebé que creía de ambos y el hombre dijo que se enteró hasta que vio los reportes del rapto en los medios de comunicación.
Cody Salfen, abogado de Ramírez, le dijo a la jueza que los testimonios que Márquez le dio al policía carecen de credibilidad debido a que el hombre cuenta con una acusación de violencia doméstica de años atrás.
Así se planeó el robo del bebé Brandon
Yesenia Guadalupe Ramírez y José Román Portillo planearon por semanas cómo robarse al bebé Brandon Cuellar, e incluso compraron pañales y fórmula para recién nacidos para mantenerlo cautivo, según el caso construido por la Fiscalía del condado de Santa Clara y detallado en una acusación formal.
Ambos enfrentan cargos por conspirar para cometer un crimen, secuestro de un menor y robo en primer grado -todos delitos graves-. Los fiscales le pidieron al juez negarles la libertad bajo fianza por el “peligro que representan para el menor” y el “riesgo de que se den a la fuga”.
En los días previos al rapto, Ramírez presuntamente le proporcionó un vehículo a Portillo para cometer el crimen. La mujer también consiguió un asiento de automóvil para bebés y se lo entregó para que pusiera ahí al menor. Portillo, por su parte, compró pañales y fórmula de infante con varios días de anticipación para cuidar a la víctima, según detallan los documentos judiciales.
Familiares de la víctima dijeron a Noticias Univision 14 que Yesenia Guadalupe Ramírez parecía estar “obsesionada con el bebé y que en varias ocasiones les había pedido “que se lo prestaran para llevarlo de paseo”.
El robo de “baby Brandon”, como le llamaron las autoridades, generó atención a nivel nacional y desató un operativo de búsqueda que se prolongó por más de 20 horas y movilizó no solo a la Policía de San José, sino también a oficiales de la Patrulla de Caminos de California y agentes del FBI.
El día del secuestro, Yesenia Guadalupe Ramírez había llevado a Victoria Mejía, abuela del menor, y al bebé Brandon Cuéllar, a realizar algunas compras a una tienda Walmart sobre la avenida Story Road. Cuando regresaron al apartamento de la abuela en Elm Stree, ésta acostó al menor en una cama dentro de la vivienda y regresó al vehículo a “sacar unas bolsas”.
En ese lapso, cámaras de videovigilancia captaron a Portillo yéndose del apartamento con un asiento para bebés donde se presume llevaba al bebé.
Un día después del secuestro, Brandon Cuellar fue hallado con vida en la vivienda de José Román Portillo, a unas cinco millas del apartamento de Elm Street donde vive la abuela. Ramírez y Portillo fueron arrestados ese mismo día por la Policía de San José, así como un tercer sospechoso que más tarde fue deslindado del caso y puesto en libertad.
























