En medio del impulso por expandir la capacidad de detención de inmigrantes,
la administración Trump adjudicó un contrato para construir el centro de detención más grande de Estados Unidos.
La instalación estará ubicada en
Fort Bliss, una base militar al este de El Paso, y
podrá albergar hasta 5,000 personas.
Será un campamento compuesto por tiendas de campaña tipo militar y
ocupará unas 60 acres de terreno desértico.
Según documentos oficiales del Departamento de Defensa, el contrato fue adjudicado a la empresa
Acquisition Logistics LLC, con sede en Virginia, y
tiene un valor inicial de $231.9 millones, aunque podría alcanzar los $1,238 millones si se ejercen todas las opciones contempladas.
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¿Qué es Fort Bliss y por qué ahí?
Fort Bliss es
una de las bases del Ejército más grandes del país. Está en el corazón del oeste de Texas, en la frontera con México.
Desde hace años ha sido utilizada en distintas emergencias migratorias, pero nunca a esta escala.
Bajo este contrato,
el sitio servirá como centro temporal de detención y deportación. La instalación tendrá capacidad para procesar, alojar y trasladar personas detenidas por agentes migratorios, en un momento en que
el gobierno federal dice necesitar más espacio para detener a quienes cruzan la frontera de forma irregular.
Army
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¿Cúal es la empresa contratada?
Acquisition Logistics es una empresa que históricamente ha ofrecido servicios al gobierno federal, pero
no tiene experiencia directa operando centros de detención. Registros públicos evidencian que la mayoría de sus contratos pasados con el Departamento de Defensa
no superaban los $30 millones en total. Sin embargo, fue seleccionada bajo
un programa especial para pequeñas empresas. La construcción y operación del campamento será, en parte, subcontratada a otras compañías, como Amentum y Disaster Management Group, que han participado en instalaciones similares y en respuestas a emergencias.
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¿Qué preocupa de estas instalaciones?
La decisión de usar tiendas de campaña como principal estructura ha generado alarmas entre organizaciones de derechos humanos.
“Todas las razones por las que usted y yo vivimos en casas y no en tiendas van a surgir inevitablemente en un centro sin paredes, sin pisos ni aislamiento”, dijo Emma Winger de
American Immigration Council.
Estas instalaciones
ya han tenido antecedentes preocupantes en otros estados. Un reciente informe de
Human Rights Watch documentó
condiciones inhumanas en centros similares en Florida, donde
personas dijeron dormir en el suelo sin colchones y tener que usar el baño frente a otras personas. En los Everglades,
un campamento conocido como “Alligator Alcatraz”, construido en tiempo récord,
fue señalado por fallas en los aires acondicionados, comida con insectos y baños desbordados.
AP Photo/Rebecca Blackwell
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¿Por qué ahora?
La administración ha dicho que
su objetivo es poder detener a más de 1 millón de personas al año. Para eso,
el Congreso autorizó en mayo un presupuesto de $45,000 millonesexclusivamente para
ampliar capacidad de detención.
Además de Fort Bliss, el gobierno también planea usar otras bases militares, por ejemplo
en Nueva Jersey.
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La construcción del centro de detención más grande del país en medio del desierto texano
marca un punto de inflexión en la política migratoria. Aún sin funcionar, ya levanta preguntas urgentes:
¿puede un campamento de tiendas garantizar condiciones dignas? ¿Es este el modelo que queremos replicar para lidiar con la migración?
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