En The Black Ant, un restaurante de NYC, se comen saltamontes, hormigas y otros insectos. Y, aunque para algunos parezca algo novedoso, en realidad comer insectos no es nada nuevo. Hay evidencias de que la ahora llamada gastronomía etno, se ha encontrado en cuevas antiguas de México e, incluso, de Estados Unidos.
En este restaurante de NYC se comen saltamontes y hormigas… Y tienes que sacar turno para probarlos
The Black Ant, o La hormiga negra, es un restaurante que le hace honor a su nombre, varias de sus recetas se realizan con ese insecto. Algunos llegan pensando que su variedad de gusanos se sirven crudos… ¿Tú qué crees?
Video No están enterrados en el patio: Chef explica dónde mantiene los insectos de sus recetas mexicanas
“Los insectos son muy nutritivos”, dijo al equipo de Univision Digital el chef ejecutivo de The Black Aunt, Eduardo Santos. “Son ricos en proteínas y dan energía”.
Sus recetas, dice, son un acercamiento a lo mejor de la cocina mexicana, con fusiones no encontradas en ningún otro lugar. De ahí que la Guía Micheline, autoridad en reseñas culinarias, le haya dado buenos elogios.
Santos habla de algunas de las creaciones que más piden sus clientes, como el guacamole espolvoreado con chicatanas (hormigas negras), recolectadas a mano en México y asadas con ajo y chile.
Su plato más popular es el que tiene más insectos
“En nuestro menú tenemos el plus de que tenemos varios platos con insectos, con hormiga chicatana, con chocolines, lo que se maneja por temporada, de ahí el nombre”.
Entre más insectos tenga la receta, mayor es su demanda. De ahí que su platillo más popular sea la tlayuda: “Es el plato oaxaqueño que tenemos como inspiración, es el plato con más insectos manejamos, tenemos un asiento de chapulín, un puré de frijol con sal de chocolín y gusano, gratinamos con queso Oaxaca y acabamos con la parte de encima con ensalada de quelites y una salsa macha”.
También menciona las croquetas de chapulín, pequeñas bolitas hechas de harina de yuca y saltamontes y patitas de chapulines.
En The Black Ant, tambiénlas bebidas tienen que ver con insectos. Por ejemplo, su bebida insignia, Yum Kaax, que es un cóctel de maíz y mezcal, se sirve en un vaso bordeado con sal de hormiga picante. Y, en vez de una rodaja de limón, viene decorado con un brillante saltamontes asado sobre una cáscara de naranja.
¿Cómo sirven los insectos vivos o cocinados?
Santos asegura que sus clientes no muestran disgusto frente a la presencia de insectos adorando sus creaciones. Por el contrario: “Viene a buscar sabores nuevos. Les gusta la experiencia de tratar algo distinto”.
Y muchos, dice el chef, comparten las mismas preguntas: “Si los insectos están vivos, si los tenemos en el patio, si están enterrados…”.
Así es que, como parte de la experiencia culinaria en The Black Aunt, el personal está preparado para explicar a su clientela todo el proceso que conlleva la caza y la cocción del los diferentes insectos que no están ahí ni vivos, ni enterrados en el patio del restaurante.
Los insectos de estas creaciones culinarias están bien refrigerados. “Son cazados en Oaxaca, por una familia que se ha dedicado a eso toda la vida”, revela Santos. “Y los importamos desde México, desde donde nos los mandan debidamente procesados: algunos con chile, otros con especies o bien con limón”.
