Al no poder aspirar a un trabajo formal, inmigrantes recién llegados a Nueva York y que viven en refugios de la Ciudad, buscan la manera de hacerse de recursos monetarios para hacerse de recursos económicos.
Inmigrantes que viven en refugios de Nueva York buscan la forma de obtener ingresos
Al no poder tener un trabajo formal, inmigrantes recién llegados a Nueva York y que viven en refugios de la Ciudad, buscan trabajos informales o actividades para hacerse de recursos.

Muchos de ellos buscan algún trabajo temporal o informal como jornaleros o limpiando casas para poder allegarse de algunos dólares, mientras otros buscan actividades que les pueden dejar dinero.
Wendy González, venezolana que llegó hace poco junto con su esposo y 2 niños a la Ciudad, se dedican a recorrer las calles de Queens en busca de latas y plástico para poder venderlas en centros de reciclaje y obtener ingresos.
La familia logra juntar unos 50 dólares por día, que los utilizan para comprar lo básico para subsistir.
“Yo le dije a mi esposo: vamos a salir a ver qué hacemos y de verdad empezamos a reciclar plástico. Al principio no sabíamos qué era reciclable", comentó.
“Mi esposo es cerrajero, electricista y plomero. Que no hemos conseguido empleo es otra cosa, pero si buscamos la manera porque nuestros hijos dependen de nosotros”.
En ocasiones las mujeres salen temprano a limpiar casas, pero muchas veces no pueden aceptar trabajos por las tardes o noches, pues tienen un horario que cumplir en el refugio.
“Hay un horario específico para llegar acá, no puedes sobrepasar los límites de la hora”, comentó una de las residentes de un refugio.
El domingo, u na mujer de origen colombiano se quitó la vida en el refugio ubicado en el área de Jamaica en Queens.
Familiares y personas que convivían con ella señalaron que la mujer se encontraba agobiada porque no podía encontrar la manera de obtener ingresos al no poder dejar a sus hijos, menores de edad, en el refugio para salir a buscar trabajo.
Se estima que en los últimos 4 meses más de 13 mil inmigrantes han llegado a Nueva York, unos 2,500 enviados por Texas en autobuses.
Esto ha traído una crisis de falta de espacio en los refugios.

















