ORLANDO, Florida.- El estado de Florida ejecutó este martes a Victor Tony Jones, un hombre de 64 años condenado por el asesinato de una pareja durante un robo en Miami-Dade en 1990.
Florida ejecuta a Victor Tony Jones: ¿por qué este caso marca un récord histórico?
Florida rompe récord con 13 ejecuciones en 2025, superando el máximo anual previo de ocho en 2014.

El crimen por el que fue condenado ocurrió en diciembre de 1990. De acuerdo con los expedientes judiciales, Jones era un empleado recién contratado en un negocio propiedad de Matilda y Jacob Nestor. Una noche, durante un intento de robo, apuñaló a Matilda en el cuello y a Jacob en el pecho. Gravemente herido, Jacob logró retirarse a una oficina y disparar cinco veces con una pistola calibre .22, alcanzando a Jones en la frente.
La policía lo encontró aún en la escena, herido y con dinero y pertenencias de la pareja en sus bolsillos. Jones fue hospitalizado, procesado y, en 1993, sentenciado a muerte tras ser declarado culpable de dos cargos de asesinato en primer grado y dos de robo a mano armada.
Con esta ejecución, el número de muertes aplicadas por inyección letal en lo que va del año asciende a 13, marcando un nuevo récord en la historia moderna del estado y consolidando a Florida como el territorio con mayor número de ejecuciones en Estados Unidos en 2025.
Jones fue declarado muerto a las 6:13 de la tarde en la Prisión Estatal de Florida, cerca de la localidad de Starke. La ejecución inició puntualmente a las 6:00 p.m., cuando se abrió la cortina de la sala de observación.
Consultado por sus últimas palabras, respondió únicamente: “No, señor”. Dos minutos después comenzó el flujo de los fármacos: un sedante, un paralizante muscular y un agente que detiene el corazón.
Testigos relataron que su respiración se agitó durante algunos minutos antes de cesar por completo. El alcaide intentó verificar signos de conciencia, pero Jones no respondió. Finalmente, un médico certificó la muerte. Autoridades penitenciarias señalaron que el procedimiento transcurrió sin complicaciones.
En las semanas previas a su ejecución, Jones intentó frenar la condena argumentando que padecía discapacidad intelectual y que había sido víctima de abusos durante su adolescencia en un reformatorio estatal que años después cerró. La Corte Suprema de Florida rechazó esos alegatos, determinando que el asunto de la discapacidad ya había sido litigado y que los supuestos abusos nunca se presentaron en el juicio original. Horas antes de la ejecución, la Corte Suprema de Estados Unidos desechó sin comentarios su apelación final.
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Florida rompe récord histórico en la aplicación de la pena de muerte
La de Jones fue la decimotercera ejecución realizada este año en Florida, superando por amplio margen el récord previo de ocho ejecuciones en 2014. Desde que la Corte Suprema de EE.UU. restituyó la pena de muerte en 1976, ningún año había registrado tantas muertes en el corredor de la muerte floridano. En el conjunto del país, 34 personas han sido ejecutadas en 2025, con Florida a la cabeza, seguido por Texas con cinco.
El gobernador Ron DeSantis ya ha firmado órdenes para dos nuevas ejecuciones programadas en octubre. El 14 será ejecutado Samuel Lee Smithers, de 72 años, condenado por asesinar a dos mujeres en 1996. Dos semanas después, el 28 de octubre, está previsto el ajusticiamiento de Norman Mearle Grim Jr., de 65 años, culpable de la violación y asesinato de una vecina en 1998.
Con estos casos, Florida cerrará el año con un calendario de ejecuciones sin precedentes en la historia reciente del país.




























