Universidad Internacional de Florida (FIU) tendrá agentes de inmigración en sus recintos: No es la única

MIAMI, Florida . - La Universidad Internacional de Florida (FIU, por sus siglas en inglés) confirmó que es una de las múltiples instituciones educativas que comenzará a capacitar a su cuerpo policial para hacer cumplir leyes migratorias, específicamente a través del acuerdo 287(g).

La semana pasada, FIU al igual que otras universidades del estado de Florida firmaron un acuerdo de cooperación con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), apoyando la ofensiva migratoria impulsada por el gobierno del presidente Donald Trump.

La firma de este acuerdo surge en un momento de incertidumbre para los estudiantes internacionales, que en meses recientes han visto los casos de compañeros deportados y de otros a los que les niegan las visas.

FIU es una de las universidades con mayor población hispana en Florida, con un 68% de su total de estudiantes, de acuerdo a U.S. News & World Report.

Muchos de ellos ya son residentes permanentes, y aproximadamente 600 estudiantes forman parte del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), una política migratoria que protege de la deportación a quienes llegaron al país siendo niños.

¿Qué es el acuerdo 287(g)?

El acuerdo 287(g) corresponde a una sección añadida a la Ley de Reforma de la Inmigración Ilegal y Responsabilidad del Inmigrante de 1996.

Este permite que ICE autorice a agentes estatales o locales para desempeñar funciones específicas como agentes de inmigración, siempre bajo la supervisión del gobierno federal. El objetivo principal del programa, se asegura, es "mejorar la seguridad del país" mediante la detención, interrogación a personas sospechosas extranjeras o personas con antecedentes criminales.

En el contexto universitario, esta colaboración permite que los oficiales de policía del campus puedan interrogar, detener e incluso arrestar a personas sospechosas de estar en situación migratoria irregular.

El paquete de leyes migratorias que respalda este tipo de acciones fue firmado en febrero de este año por el gobernador Ron DeSantis, tras varias semanas de debates en el Congreso estatal.

Impacto en los estudiantes internacionales

La comunidad más afectada por estas políticas es la de estudiantes internacionales, quienes deben cumplir una serie de requisitos para estudiar en Estados Unidos: ser aceptados en una institución académica acreditada, obtener una visa tipo F-1, tener pasaporte vigente, demostrar solvencia económica, cubrir costos administrativos y presentar diversos formularios migratorios.

Los estudiantes internacionales no solo enriquecen el ambiente cultural en las universidades estadounidenses, sino que también representan una importante fuente de ingresos económicos.

De acuerdo con un estudio de la Asociación Internacional de Educadores (NAFSA), durante el periodo 2023-2024 hubo aproximadamente 1.1 millones de estudiantes extranjeros en universidades de Estados Unidos, quienes contribuyeron con 43.8 mil millones de dólares a la economía nacional.

Universidades como la de Nueva York (NYU) cuentan con una matrícula donde el 22% de los estudiantes provienen del extranjero.

Sin embargo, aunque los estudiantes internacionales tienen las mismas protecciones constitucionales básicas que los ciudadanos estadounidenses, el proceso para obtener una visa estudiantil se ha endurecido.

Recientemente, el secretario de Estado Marco Rubio ordenó a los diplomáticos revisar el contenido de las redes sociales de los solicitantes como parte del proceso de evaluación.

Incluso estudiantes nacidos en el extranjero que ya son residentes permanentes o ciudadanos naturalizados podrían estar en riesgo de perder su derecho a permanecer en Estados Unidos bajo ciertas circunstancias.

Datos corroborados por CNN, reflejan que más de 525 estudiantes, profesores e investigadores de 88 universidades han visto sus visas revocadas este año.

Muchas de estas revocaciones se deben a delitos menores cometidos hace años.

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