“Suplicaron por su vidas y los maté”, confesó exmarine que asesinó a cuatro personas en Lakeland

Bryan Riley, exmarine, detenido tras matar a cuatro personas en una casa de Lakeland, en el Condado de Polk, declaró que las víctimas suplicaron por sus vidas, pero él acabó con ellas. El caso sigue bajo investigación para esclarecer los motivos de los crímenes.

“Suplicaron por sus vidas y yo las maté de todos modos”, confesó Riley. Así lo informó el alguacil del condado de Polk, Grady Judd, quien dio avances de las investigaciones del tiroteo en una vivienda.

Riley, de 33 años, quien estuvo destacado como francotirador en Irak y Afganistán, se encuentra detenido sin derecho a fianza. Es acusado por cuatro cargos de asesinato en primer grado, indicaron las autoridades.

Entre las víctimas está un bebé de tres meses

Entre las víctimas se encuentra el juez Gleason, de 30 años; una mujer de 33 años y su bebé de 3 meses, así como una mujer de 62 años. La identidad de estas tres víctimas no se ha revelado, a petición de los familiares.

Tras su detención, Riley les dijo a los investigadores: “Saben por qué hice esto”, sin embargo, los investigadores aún no tienen respuestas sobre el motivo que llevó al exmarine a matar a las cuatro personas.

Incluso, se informó que no hay ningún tipo de conexión entre Riley y las víctimas, lo que produce aún más dudas, sobre el motivo que llevó al exmarine ingresar a la casa para matar a las cuatro personas, en el Condado de Polk.

Tal vez nunca se sepa el motivo del crimen, indica fiscal

“La gran pregunta que todos tenemos es, ¿Por qué? (...) " No lo sabremos hoy o tal vez nunca", declaró el fiscal local Brian Haas, quien negó el derecho a fianza a Riley. A decir de la novia del exmarine, él atravesaba por una crisis de salud mental.

El fiscal Hass indicó que una enfermedad mental de Riley, sería la única explicación, hasta el momento, por la que habría realizado los crímenes. Pero las investigaciones siguen abiertas para esclarecer los hechos.

Fue la madrugada del domingo que Riley ingresó a la casa del juez Gleason para cometer los crímenes. La mascota de la familia, un pequeño perro también fue asesinado.

Al tiroteo sobrevivió una niña de 11 años, quien sigue hospitalizada.