LOS ÁNGELES, California. - La Patrulla de Caminos de California (CHP) busca al sospechoso de disparar y matar a Aiden Leos, de 6 años, durante un aparente caso de furia al volante que se registró en la autopista 55 en el condado de Orange, al sur de California, el pasado viernes 21 de mayo. El sujeto que disparó iba de pasajero en un vehículo que, según testigos, podría ser un Volkswagen Jetta blanco.

“ Si la gente sabe algo o estaba manejando en la autopista 55 entre las 7:45 y las 8:15 am (del viernes) y su vehículo tiene cámaras, por favor llame a nuestra oficina”, dijo Florentino Olivera, oficial de CHP, en un intento por lograr que la ciudadanía colabore con las pesquisas para dar con el hombre que disparó contra el vehículo en el que el niño iba con su mamá rumbo a su escuela.

La información de testigos puede ser valiosa para determinar qué sucedió entre los carros antes de la tragedia y para encontrar al sospechoso de matar a Aiden Leos, dijeron las autoridades. Las pistas se pueden suministrar a la línea 714- 567-6000 de la oficina de CHP en Santa Ana.

Las autoridades buscan a un hombre y una mujer que viajaban en un auto tipo sedan, de color blanco, posiblemente de marca Volkswagen Jetta. La mujer era la conductora, pero fue su copiloto quien presuntamente disparó contra el auto donde viajaba el menor en un acto de represalia.

De acuerdo con la versión de Alexis Cloonan, hermana de Aiden, el niño y su mamá Joana Cloonan iban ruta a la escuela en Yorba Linda sobre la autopista 55 a las 8:11 am cuando “se les atravesó un carro blanco posiblemente un Volkswagen Jetta”. La señora Cloonan, al parecer, le hizo un gesto a la conductora del sedán y esto desató la escalada de violencia que terminó con la vida del niño.

Tras los disparos, el Jetta desapareció en el tramo norte de la autopista 55 con rumbo desconocido. El incidente fue descrito como de posible "furia al volante".

Viaje mortal a la escuela

"Ella lo tenía en sus brazos mientras estaba muriendo", así describió la hermana de Aiden los últimos momentos de la vida de su hermano en los brazos de su mamá. Una escena que "ninguna madre debería vivir".

El pequeño Aiden iba hacia la escuela con su madre en el asiento trasero del carro cuando recibió un disparo que ni él ni su madre esperaban. De acuerdo con el testimonio de la familia, la madre del menor no se percató de lo que había sucedido hasta que el niño le advirtió que " le dolía su pancita". Minutos antes, la madre habría reaccionado ante la imprudencia de otro conductor, pero jamás imaginó que en respuesta acabarían con la vida de su hijo.

La familia ha establecido una cuenta GoFundMe para los gastos del sepelio de el pequeño Aidan Leos.

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