Padre hondureño es baleado de muerte por el FBI en Houston: Compensan a su hijo con $1.3 millones

Un juez federal de Houston otorga casi 2 millones de dólares a los familiares de Ulises Valladares por concepto de daños y perjuicios, tras determinar que el agente del FBI Gavin Lappe fue negligente al disparar y matar al padre hondureño, que había sido secuestrado en Houston, Texas.

Video Corte otorga casi $2.5 millones a familia de hombre hispano del área de Houston muerto a manos del FBI

HOUSTON, Texas - Una corte federal encontró culpable a Gavin Lappe, un agente del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), por la muerte del hispano Ulises Valladares en el área de Houston.

Y casi 6 años más tarde, Kenneth Hoyt, juez federal de Houston, concedió casi 2 millones de dólares a los familiares de Valladares por daños y perjuicios tras determinar que Lappe fue negligente al disparar y matar al hondureño, durante un fallido rescate de rehenes.

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En su reciente determinación, a inicios de marzo, el juez Hoyt dispuso que el hijo del hispano, Ulises Valladares Jr., reciba 1.3 millones de dólares, mientras que la madre de Valladares, Justina García, recibirá 611,000 dólares. También dispuso el pago de 475,000 dólares en concepto de honorarios de abogado.

Lappe no fue condenado porque está protegido por la inmunidad cualificada, que exime a las fuerzas del orden de responsabilidad por infracciones. Sin embargo, se permitió que el caso contra el gobierno federal progresara, ya que no está protegido frente a la responsabilidad.

El juez Hoyt también canceló una orden de protección que había impedido que Lappe fuera identificado por su nombre en los documentos judiciales.

Un rescate de rehenes que salió mal

El 24 de enero de 2018, Ulises Valladares fue secuestrado junto a su hijo Ulises Valladares Jr., de solo 12 años.

Según los documentos del tribunal federal, ambos fueron mantenidos como rehenes en su propia vivienda en Conroe, al noreste de Houston y, en un momento dado, fueron separados cuando el padre fue trasladado a otra casa.

El menor de edad fue rescatado a las pocas horas.

Entonces se pidió ayuda al FBI: Los dos agentes enviados a rescatarlo fueron Gaven Lappe y Jefferey Hawkins.

Lappe disparó y mintió sobre lo que había ocurrido

Los documentos judiciales revelan que, durante el rescate, el agente Hawkins vio una silueta a través de una de las ventanas cuando llegaron a la casa. Eso hizo que Lappe disparara dos veces, matando a Valladares padre, que tenía los ojos vendados y estaba atado en ese momento.

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Según un informe de la autopsia, una de las balas alcanzó a Valladares, atravesándole el brazo izquierdo y saliendo por la espalda.

Los investigadores confirmaron que Lappe afirmó inicialmente que Valladares se asomó por la ventana y cogió su rifle, algo que nunca se comprobó porque siempre estuvo desarmado.

Tras revisar el caso, el juez federal de Houston, Kenneth Hoyt, llegó a la conclusión de que nunca había sucedido y dictaminó que Lappe fue negligente en la situación y que los disparos fueron la única causa de la muerte de Valladares.

Hoyt también mencionó que Lappe baleó a una silueta en la ventana sin confirmar a quién disparaba y que utilizó su arma a pesar de que no había ninguna amenaza directa para él ni para otro agente cercano.

Justicia por el secuestro de Valladares

El 4 de agosto de 2021 fue condenada a 45 años en la cárcel Delia Gualdina Velásquez, de 50 años, tras ser encontrada culpable de estar involucrada en el secuestro agravado de Ulises Valladares quien era su familiar.

Durante el juicio se demostró que Velásquez participó en la planificación y ejecución del rapto.

Los otros secuestradores fueron identificados como Jimmy Tony Sánchez, de 38 años, Nicholas Chase Cunningham, de 42 años y Sophia Pérez Heath, de 35 años.

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