Texas, un estado de sólida tradición republicana, ha ganado la atención de los dos partidos rumbo a las elecciones presidenciales de noviembre. Mientras que el candidato demócrata Joe Biden lanzó su primer anuncio por televisión, Donald Trump ha anunciado una nueva visita al estado, la segunda en menos de un mes.
Biden lanza anuncio en Texas mientras Trump planea una nueva visita al estado
Las campañas del candidato demócrata y el presidente Trump ponen la mira en Texas, donde las encuestas dan un resultado cerrado en un estado que el presidente ganó en 2016 con el menor margen para un republicano en 40 años.

El primer mandatario visitará Odessa el próximo 26 de julio para recaudar fondos. Trump reanudó sus giras con este fin en Dallas, el pasado 11 de julio.
Por su parte Biden ha lanzado su primer anuncio por televisión dirigido a los texanos. Del comercial, de un minuto de duración, destacan dos omisiones: el nombre “Donald Trump” y el hecho de que los republicanos no han perdido una elección presidencial en Texas desde 1976.
El mensaje del exvicepresidente se enfoca en la atención a la pandemia del coronavirus. Texas actualmente es el cuarto estado con el mayor número de contagios en el país. En la última semana ha registrado más de 10,000 nuevos casos diarios de covid-19, para un total de cerca de 286,000 desde el inicio de la emergencia sanitaria.
¿Territorio en disputa?
“Estoy pensando en todos ustedes en Texas. Sé que el aumento de casos ha causado miedo y aprensión. La gente tiene miedo. Especialmente quienes están preocupados por sus padres, sus abuelos o seres queridos que corren mayor riesgo”, dice Biden en el anuncio. “El virus es duro, pero Texas es aún más duro”.
El presidente Gerald Ford fue el último republicano en perder Texas en 1976, hace 44 años, en las elecciones que hicieron presidente a Jimmy Carter. Los demócratas no han ganado una elección estatal texana desde 1994, cuando Dan Morales consiguió la victoria para Fiscal General del estado.
Pero los cambios demográficos y, más en concreto, los resultados de las intermedias de 2018 (cuando los demócratas consiguieron importantes victorias tanto en la Cámara estatal como en la federal y el excongresista Beto O’Rourke se quedó a tres puntos de derrotar al republicano Ted Cruz en el Senado) han puesto a Texas, un histórico bastión conservador, como un posible territorio en disputa.
A estos datos se suma el hecho de que Trump consiguió la victoria con el menor margen para un republicano en 40 años en 2016. Derrotó a Hillary Clinton por una diferencia de nueve puntos, el peor resultado para los conservadores desde 1976.
Resultados cerrados
Una encuesta del Dallas Morning News y la Universidad de Texas difundida el domingo muestra una diferencia a favor de Biden por cinco puntos. Trump restó importancia al sondeo en un tele town-hall a favor del candidato republicano Ronny Jackson (del distrito 13, Amarillo), donde dijo que esperaba una “rotunda victoria” en el estado.
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El resto de los sondeos muestran una tendencia cerrada entre Biden y Trump. El promedio entre las últimas cinco encuestas realizadas en Texas (datos recopilados entre junio y julio) refleja una diferencia de décimas: un 45,4% a favor del presidente frente a un 45,2% del demócrata, según RealClearPolitics.
El anuncio de Biden, llamado “Tough” (duro), tiene versiones similares que se transmitirán también en Arizona, Florida y Carolina del Norte. El exvicepresidente anima a los votantes a practicar la distancia social, lavarse las manos con regularidad y el uso de mascarillas en espacios públicos. “Manténganse seguros y usen un cubrebocas”. Trump no es mencionado.
El presidente Trump no había utilizado una mascarilla en público hasta el sábado pasado, en que usó una durante una visita al Hospital Militar Walter Reed, en Maryland.

















