MESQUITE, Texas. - La familia Connor manejó desde la ciudad de Jasper, Texas, al sureste del estado, esperanzados en que al llegar a un centro de asistencia para evacuados recibirían la ayuda que se les prometió. Sin embargo, se encontraron con una desagradable sorpresa.
Reportan inconvenientes en uno de los centros para personas evacuadas por el huracán Laura en el norte de Texas
Varias personas están llegando al norte de Texas escapando del fenómeno natural que se acerca a las costas de Texas y Louisiana. Algunos de ellos aseguran que no les han brindado mucha ayuda, solamente a quienes han llegado en autobuses pagados por el estado.

“Nos dijeron que no había ‘vouchers’ disponibles, que solamente había para aquellos que llegaron en el autobús auspiciado por el Estado de Texas,” aseguró Lynnette Connor a Noticias 23.
Esta familia, como decenas más, decidió manejar en su propio auto hasta el centro habilitado en la ciudad de Mesquite, uno de los dos acondicionados para recibir a residentes del sur de Texas que fueron obligados a dejar sus hogares ante el inminente paso del huracán Laura.
“Es frustrante,” señaló el señor Sanders Tomak III, quien manejó ocho horas desde la ciudad de Orange, justo en la frontera con Luisiana. El comentó que no le parecía justo que les obliguen a evacuar y no tener a dónde ir. “Tuve que pagar un motel anoche (martes) para poder dormir,” agregó.
El portavoz de la ciudad de Mesquite, Wayne Larson, dijo a Noticias 23 que este centro solamente funciona como un paso rápido para las personas ya que lo único que hacen es registrarlos y llevarlos a un hotel.
“Nosotros (Mesquite) daremos ayuda a todos los que lleguen en sus propios medios y no necesitarán pagar por un hotel,” dijo Larson quien también prometió que esta ciudad ayudará a toda persona que venga a pedir ayuda.
Al señor Arthur Washington la angustia lo embargaba pues había llegado desde Beaumont, al sur de Texas donde cruzaría el huracán, con sus cinco hijos, su esposa y madre. “No saber a dónde ir es difícil,” comentó mientras esperaba por la ayuda que le habían prometido.
En solo un par de horas esta familia de ocho personas empacó todo lo que pudo y lo puso en su camioneta. Contaron que no quieren volver a tener que vivir lo mismo que con los huracanes Harvey y Katrina. “Nos rescataron de un techo, fue terrible,” dijo Tammy Washington, residente evacuada.
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