CHICAGO, Illinois. Deon ‘Strawberry’ Hampton, la presa transgénero que demandó al Departamento Correccional de Illinois por presuntos abusos de parte de guardias y reos, será transferida este miércoles a una nueva instalación carcelaria: el centro correccional Lawrence en Summer en el mismo estado de Illinois, aunque aún no se determina si será enviada a una prisión para mujeres.
Transgénero, que denunció haber sido víctima de abusos policiales, será cambiada de prisión
Las autoridades de Illinois no han decidido aún si Deon ‘Strawberry’ Hampton, de 26 años de edad, estará en una cárcel para mujeres para terminar de cumplir su condena de 10 años por robo.


Hampton, quien está cumpliendo una condena de 10 años por robo, presentó dos demandas federales contra el Departamento Correccional de Illinois (IDOC por sus siglas en inglés) y una lista de oficiales correccionales por abusos que asegura sufrió en los centro correccionales de Pinckneyville y Menard.
De acuerdo con The Souther, la demanda contra el centro correccional Menard contiene más de 12 cargos, incluida la violación de la cláusula de protección igualitaria, el uso excesivo de fuerza, el castigo cruel e inusual y la violación de la Ley de Delito de Odio de Illinois.
Hampton alega que los abusos que ella sufrió fueron debido a su condición de transgénero.
Hampton, de 26 años de edad, quien dice que se identifica como mujer desde que tenía 5 años de edad, planteó su caso el viernes pasado durante el primer día de la audiencia. Durante su testimonio, Hampton aseguró que ella sufrió varios incidentes de abuso a manos de agentes penitenciarios, tanto verbales como físicos.
Oficiales la humillaron
Según la publicación, Hampton mencionó un incidente en la correccional de Pinckneyville donde los oficiales la sacaron a ella y a su compañero de celda y les dijeron que bailaran para los hombres. También contó que oficiales la obligaron a que tuviera relaciones sexuales por teléfono con un oficial y a meterse el miembro viril de otro guardia en la boca.
Después de ser llevada a Menard, el abuso no se detuvo. La presa y otros reclusos testificaron que Hampton fue sacada de su celda después de solicitar asistencia médica, solo para regresar en peor estado que cuando se fue. La demandante también comentó que era de conocimiento público entre los reclusos que serían recompensados por los guardias por herirla a ella y a otros presos con los que la joven se asociaba según el medio.
No ser capaz de presentarse como mujer en la prisión masculina, donde no puede usar el pelo o las uñas largas, también fue devastador psicológicamente para la joven según la defensa comandada por el MacArthur Justice Center de Chicago y el Uptown People's Law Center.
Si bien los funcionarios de prisiones tienen la opción de asignar a reclusos transexuales a las cárceles de mujeres, esto sucede con poca frecuencia. Los datos federales de 2016 indican que no había prisioneros transgénero en las dos prisiones femeninas de Illinois, mientras que había 28 en las 24 prisiones masculinas del estado según el Chicago Tribune.
La defensa de Strawberry ve el acuerdo del traslado de la joven al centro correccional de Lawrence como algo positivo.
“Lo más importante siempre ha sido la seguridad de la Sra. Hampton. Ella sintió que estaba en riesgo en Menard y sentimos que la evidencia estableció que corría un gran riesgo si se quedaba ahí", dijo Alan Mills, director ejecutivo de Uptown People’s Law Center.
El lugar adecuado
Dentro de 60 días el Comité de Trastornos de Identidad de Género revisará si Hampton se encuentra en el lugar adecuado, si está recibiendo la atención de salud mental que necesita, y tomará decisiones sobre dónde permanecerá mientras cumple el resto de su sentencia.
Hampton y su equipo legal han retenido el derecho de volver a demandar a IDOC en base a cualquier incumplimiento de los términos acordados.
Si bien el acuerdo al que se llegó no sienta un precedente legal, pues aún no se ha tomado una decisión sobre si Strawberry será la primera presa transgénero en el estado a la que se le permita ser cambiada de una prisión de hombres a una de mujeres, la defensa dijo que espera que su caso sí ayude a cambiar futuras decisiones del IDOC con respecto a otros reclusos transgénero.
"Esperamos que el Departamento de Correcciones a través de este proceso haya aprendido que tienen que prestar más atención a las cuestiones transgénero y que tienen que hacer el tipo de evaluación de forma individualizada que exige la ley federal", dijo el abogado.

















