Imagínese poder entrar a un lugar donde puede ver arte y disfrutar de comida mexicana al mismo tiempo. Es decir, saborear con la vista y con el gusto.
DeColores, un espacio para la gastronomía y el arte local en Pilsen
Artistas de Chicago tienen la oportunidad de exhibir su arte en este restaurante en Pilsen.

Así es DeColores, un restaurante-galería que se encuentra en el 1626 S. Halsted St, y desde que abrió en octubre del 2009, se ha dedicado a promover el trabajo de artistas locales.
“Como artista, sé que a veces los artistas no tienen recursos para hacer exhibiciones privadas”, dijo Sergio Reyes, dueño del restaurante, quien es egresado del Illinois Institute of Art, Reyes consigue las obras que se exhiben en su negocio mediante curadores de arte.
Uno de estos curadores es Len Domínguez, de Carlos & Domínguez Fine Arts Gallery, también ubicada en Pilsen. “Todos [los artistas] son buenos y quiero exponer ahí una variedad de estilos, de temas y de artistas que la gente pueda apreciar y no sea una exhibición aburrida”, comentó Domínguez.
El arte que se encuentra en el restaurante, no sólo sirve para decorar las paredes, sino que también se encuentra a la venta.
“Desde un principio supe que el área en la que estábamos necesitaba algo como DeColores”, dijo Reyes, quien también comenta que el restaurante no cobra a los artistas por exhibr su trabajo en el establecimiento.
Domínguez cuenta que la relación entre DeColores y Carlos & Domínguez Fine Arts Gallery empezó hace cuatro años. El restaurante se encarga de la comida que se ofrece en las exhibiciones de la galería, y la galería provee el arte que se expone en el restaurante.
Cuando un cliente demuestra interés por una obra, dejan su información. Es entonces cuando Domínguez se comunica con ellos. Una vez realizada la venta, la galería se lleva una comisión. “Para mí [el principal objetivo] es poner el nombre de la galería y el de los artistas”.
El colorido del lugar no pasa desapercibido entre los comensales. “Me gusta el arte que ponen”, dijo María Uribe, quien visita regularmente el restaurante desde hace dos años. “Obvio, se llama DeColores y me gusta que entras y luego luego ves colores diferentes”.
Jason DaVell frecuenta el restaurante desde su inauguración. “Creo que es increíble [que expongan arte local], pero también creo que eso es un indicativo de cómo es el vecindario”, dijo DaVell. “Es muy cálido y de eso se trata Pilsen”.
Actualmente, DeColores cuenta con dos niveles y la parte superior se ocupa los días en los que hay más clientes y también para eventos especiales.
El colorido del restaurante se encuentra en planes de expansión. Reyes comenta que acaba de comprar el lote que se encuentra al norte del local, en donde quiere hacer un patio en el que sus clientes puedan “disfrutar de ‘margaritas frescas’ durante primavera y verano”.
Raquel Venado-Bolaños es estudiante de periodismo en Columbia College Chicago.
Lea también:




