Texas ejecuta al primer preso del año en EEUU: Un hombre que asesinó a quienes le vendieron una piedra haciéndola pasar por droga

Christopher Chubasco Wilkins, un hombre de 48 años, fue ejecutado este miércoles luego de asesinar a tiros a dos hombres en Fort Worth en octubre de 2005. En las últimas cuatro décadas en todo Estados Unidos se han ejecutado 1,443 presos, 539 de ellos en Texas.

Christopher Chubasco Wilkins
Christopher Chubasco Wilkins
Imagen Death Penalty Information Center

AUSTIN, Texas.- Texas ejecutó este miércoles a Christopher Chubasco Wilkins, un preso de 48 años condenado a muerte por el asesinato de dos personas quienes en 2005 le vendieron una piedra por 20 dólares haciéndole creer que era crack.

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El preso fue declarado muerto a las 6:29 p.m. tras recibir una inyección letal en la cárcel de Huntsville, según notificó el Departamento de Justicia Criminal de Texas. Antes de ser ejecutado, Wilkins declinó su derecho a pronunciar unas últimas palabras.

Wilkins cometió el asesinato el 28 de octubre de 2005 en Fort Worth, poco después de haber sido puesto en libertad tras pasar un tiempo entre rejas por posesión ilegal de armas.

Wilkins conoció a Willie Freeman, de 44 años, y Mike Silva, de 33 años, quienes le vendieron una piedra de grava haciéndole creer que se trataba de crack. Cuando Freeman se burló de él por el engaño, Wilkins lo mató a tiros, y a continuación también asesinó a Silva porque "estaba ahí", según confesó una vez detenido. Después lanzó los cuerpos a una zanja.

El preso confesó también que un día antes de los dos asesinatos había matado a otro hombre identificado como Gilberto Vallejo en una pelea de bar provocada por una disputa sobre el teléfono público del establecimiento. "Soy consciente de que son malas decisiones, pero las tomo igualmente", reconoció en dichas declaraciones. En el juicio, celebrado en 2008, Wilkins dijo al jurado que no le importaba que lo condenaran a muerte.

Wilkins presentó el 22 de diciembre de 2016 una solicitud para que su caso fuera reconsiderado debido a que “su abogado litigante se desempeñó deficientemente… que no investigó ni presentó pruebas atenuantes en la fase de castigo del juicio”. Sin embargo, esta petición fue rechazada el 4 de enero de este año debido a que no cumplía con los requisitos del recurso legal.

En las últimas cuatro décadas en todo Estados Unidos se han ejecutado 1,443 presos, 539 de ellos en Texas. La siguiente ejecución será en el estado de Virginia el próximo miércoles en donde se cumplirá la sentencia de Ricky Gray, un hombre condenado por asesinar a siete personas en 2006.

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